Top Posts
¿Por qué destrozaron la calidad educativa?
Valoraciones sobre la situación de Ruth López
Primer round: CNTE desnuda carácter neoliberal de la...
Meritocracia sin igualdad es privilegio
Un paso por la memoria del “Charras”
Cirrus Minor: “Simple Minds en México (by request)”
PSICOTERAPIA DE ROCK INTENSIVA: JUDAS PRIEST & OPETH:...
REDONDO: “Mickey 17”
¡Solidaridad con la maestra Karla Mendoza en lucha...
La transformación al servicio de los pobres o...
  • Colectivo Insurgencia Magisterial
Portal Insurgencia Magisterial
Banner
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Calendario de eventos
  • Educooperando
Espacio principalEspacio secundario

Quédate en casa (si puedes)…

por La Redacción junio 29, 2020
junio 29, 2020
1,4K

Por: Carolina Vásquez Araya. 29/06/2020

La clase trabajadora, la más castigada en estos meses de pandemia.
Te exigen quedarte en casa y no puedes evitar echar una mirada a tu alrededor con una creciente sensación de inseguridad; estás consciente de que ese mandato tiene muchas aristas y abandonar tus actividades no es una posibilidad real. Para empezar, si tu familia tiene la inveterada costumbre de comer todos los días, para abastecerse de alimentos es preciso salir de casa. Si tu jefe (o tú mismo) está ansioso y angustiado por sostener su negocio a pesar de las restricciones, es preciso salir de casa.
También debes hacerlo cuando laboras en una institución fundamental, como los servicios de salud, en donde tu trabajo es vital. Salir de casa, cuando no hay otra opción, es lo que al final del día permite a otros mantener su reclusión sin mayores problemas.
Esto, porque existe un intrincado engranaje de actividades esenciales de las cuales dependemos todos y sin cuya dinámica enfrentaríamos serios obstáculos para sobrevivir. Es un hecho indiscutible nuestra dependencia del trabajo de los demás, sobre todo si ese trabajo nos provee de alimentos, de energía para procesarlos, de una rutina para eliminar los desechos producidos a diario en los hogares, de la entrega a domicilio cuando podemos gozar de esos servicios, de todos y cada uno de los aspectos que garantizan una cierta estabilidad en el orden de la vida cotidiana.
Por eso el mandato de quedarte en casa tiene sus bemoles, dado que no cualquiera puede atender a tan sabia precaución. Sin embargo, ese confinamiento semi voluntario ha comprobado ser el único mecanismo posible para alcanzar los objetivos -tan abstractos como incomprendidos- de “aplanar la curva”, reducir los contagios y así romper la secuencia ascendente que se cierne sobre la población como una amenaza ubicua y perversa. La pandemia ha demostrado en estos meses su inmenso poder sobre todo lo que hemos considerado más o menos inamovible: ha destrozado nuestra capacidad de confiar y nos obliga a evaluar hasta qué punto somos capaces de sobreponernos a una realidad diferente, a un cambio de rutinas, a un encierro forzoso, a una transformación sutil y progresiva en nuestra manera de ver el mundo.
Durante el transcurso de este fenómeno, no solo nuevo sino también difícil de comprender, hemos sido dirigidos por mandatos no siempre basados en el sentido común, muchas veces contradictorios, en numerosas ocasiones orientados a favorecer a ciertos sectores en desmedro de la salud de la población y con un manejo muy deficiente de la información. Esto ha provocado un ambiente de rebeldía, especialmente entre los segmentos más jóvenes y otros cuyos intereses específicos –políticos o económicos- terminan por desembocar en una abierta actitud de rechazo hacia las normas de contención de la epidemia.
Aun cuando las consecuencias no han tardado en manifestarse en repuntes de contagios y pérdida de vidas humanas, la restricción contra libertades personales empiezan a verse como un sacrificio que sobrepasa la capacidad de tolerancia. En este proceso, la falta de confianza en las autoridades ha jugado un papel fundamental; sobre todo, en desmedro de un tejido social que empieza a mostrar sus debilidades y de sistemas de gobierno poco acostumbrados a enfrentar la realidad de sus profundas fallas. Aquello que nos golpea hoy es, más que un virus, una enfermedad social endémica evidenciada en la pérdida de sentido de nación y de todo lo que eso implica. Quedarse en casa no es más que un recurso de protección eventual. Lo más importante vendrá cuando salgamos de ella.

Difícil contener los deseos de salir, de regresar a la normalidad.

[email protected]
www.carolinavasquezaraya.com

Fotografía: YouTube.

Compartir 0 FacebookTwitterWhatsapp
La Redacción

noticia anterior
Regiduría sexta de Xalapa impulsa democracia participativa y convoca a Foro
noticia siguiente
El instinto de libertad.

También le podría interesar

Desinformación y negacionismo, las otras lecciones de la...

abril 7, 2025

«La pandemia tiene mucho que ver con el...

diciembre 3, 2024

Las y los trabajadores de la CDMX se...

noviembre 11, 2024

Visitantes en este momento:

1.237 Usuarios En linea
Usuarios: RedaccionA,RedaccionEM,535 Invitados,700 Bots

Blog: Perspectivas comunistas

Desde el Plantón magisterial en el Zócalo de la CDMX

Nuestras redes sociales

Blog de la Columna CORTOCIRCUITOS

Nuestros grupos de difusión

Artículos publicados por mes

Síguenos en Facebook

Síguenos en Facebook

Artículos por AUTORES

Artículos publicados por FECHA

junio 2025
L M X J V S D
 1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
30  
« May    

Artículos más leídos esta semana

  • 1

    Ante la ratificación del Director del Colegio Preparatorio de Xalapa por parte de la USICAMM la Dirección de Bachillerato lo “retira” de manera arbitraria. Comunidad escolar inicia protestas

    junio 3, 2025
  • 2

    Alto al ataque mediático contra la CNTE, magisterio, organizaciones y sindicatos

    junio 2, 2025
  • 3

    La CNTE: autonomía y movilización en el marco de una hegemonía progresista (3/3)

    junio 3, 2025
  • 4

    México. Maestros de la CNTE, continúa la huelga

    junio 4, 2025
  • 5

    Banco Azteca es premiado con 25 % de las AFORES: Pedro Hernández de la CNTE

    mayo 30, 2025
  • 6

    ¡Quién miente?, ¿la presidenta o la CNTE?

    junio 1, 2025
  • 7

    Daniela Griego, Presidenta Municipal electa de Xalapa. Recibe su constancia de mayoría

    junio 5, 2025
  • 8

    AFORES: un robo para los trabajadores. ¿Quiénes son y cuántas cuentas controlan?

    mayo 25, 2025
  • 9

    La primavera no se alquila: dignidad magisterial y respeto a la historia

    mayo 30, 2025
  • 10

    La CNTE: autonomía y movilización en el marco de una hegemonía progresista (2/3)

    junio 1, 2025
  • ¿Cuáles son los elementos de una historieta?

    febrero 15, 2017
  • 12

    EL PROBLEMA DE LA USICAMM ES… ¡TODO!

    mayo 31, 2025
  • 13

    Morir en la tortuosa búsqueda de los 43

    junio 3, 2025
  • 14

    Bukele reconoce que le estorban los tratados de derechos humanos y que lo tiene sin cuidado que lo llamen dictador

    junio 3, 2025

Rolando Revagliatti. Argentina

Raúl Allain. Perú

Juan Antonio Guerrero O. México

Vanesa Monserrat. Argentina

Carolina Vásquez Araya

Ilka Oliva-Corado

Javier Tolcachier

Columna: CORTOCIRCUITOS

Manuel I. Cabezas González

Luis Armando González

Iliana Lo Priore

Jorge Salazar

Adolfo del Ángel Rodríguez

Oswualdo Antonio G.

José Eduardo Celis

Daniel Suárez

Güris J. Fry

Jorge Díaz Piña

Ángel Santiago Villalobos

Andrés Brenner

Alejandra Cortina

José Carlos Buenaventura

Luis Palacios

@2020 - Insurgencia Magisterial

Portal Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Calendario de eventos
  • Educooperando
Portal Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Calendario de eventos
  • Educooperando
@2020 - Insurgencia Magisterial

Leer también:x

«Volver o no volver»: la educación argentina...

febrero 17, 2021

Los intereses y conflictos detrás del auge...

agosto 20, 2021

Biopolítica de la vacuna

junio 4, 2021