Por: Renaud Hernández Morales. Contacto: [email protected] 01/07/2025
Las tres políticas de la liberación.
En el intenso proyecto de la Filosofía de la Liberación mundial, y como obra final, Dussel emprendió la tarea de elaborar 3 tomos de lo que llamó “Política de la liberación”. El primer volumen de 2007 trata de la historia mundial descentrada de la política. La historia mundial y crítica propone una historia política desde los pueblos. Un nuevo paradigma histórico de-construye una nueva historia. Superar el helenocentrismo es el punto de partida demostrando que la filosofía griega tiene un origen no griego. Viene de latitudes anteriores. El segundo punto a superar es el occidentalismo, que desconoce la cultura bizantina como fundamento inicial de la Modernidad política. El tercer limite es el eurocentrismo del pensamiento político filosófico y niegan otras culturas. Otro aspecto a superar es la periodización histórica tipo europea << antigüedad, edad media, edad moderna>> y colocar las culturas hacia el extremo oriente, apareciendo los señoríos Azteca-Maya e Inca dentro de las grandes civilizaciones del mundo. Finalmente, la exclusión de América Latina en los orígenes de la Modernidad. El secularismo de las filosofías políticas es una superación en esta nueva política de la liberación, el colonialismo teórico y mental es parte de este proyecto.
En el segundo volumen de 2009 de esta “Política de la liberación” aparece la “arquitectónica”. El tratamiento de la primera “Constelación” de los sistemas políticos y sus tres niveles constitutivos (las prácticas, las instituciones y los principios) que componen la totalidad vigente. En la Modernidad, el poder político se identificó con la dominación. Ya en las “20 tesis de política” el Dr. Dussel plantea un sistema obediencial de representación y participación, y el poder delegado de la comunidad se ejerce “mandando obedeciendo”, en donde la poténtia como capacidad intrínseca de vida, es la voluntad de vida de la comunidad, superior a la potestas que ejerce el poder institucional y que se corrompe si la poténtia no se ejerce. El primer nivel de lo político es la acción política. El segundo nivel aborda el concepto de institución política y sus expresiones en el anarquismo y el conservadurismo liberal de derecha. Ya en el tercer nivel, Dussel trata los principios normativos de la política. El objetivo es presentar una Totalidad política en su carácter abstracto, aun no concreto. Sobresale la presentación de tres esferas constitutivas de lo político (esfera material, esfera de factibilidad y la esfera formal) que vertebran toda la exposición de la política-arquitectónica. Dussel pretendió crear “la construcción crítica general de todo el sistema de las categorías de las filosofías políticas burguesas modernas”.
Ya en el volumen III de 2022, se expone la segunda Constelación (negativa) y tercera constelación (positiva) de la Política. El estudio penetrante y agudo de la diacronía de los fenómenos políticos y su sincronía singular permiten a Dussel navegar con claridad por los derroteros de la Política de la liberación. Dialécticamente, la segunda constelación negativa deconstruye la primera Constelación negando la pretensión de justicia. Surge el momento revolucionario, mesiánico, contra la dominación. En la última parte surge la rebelión del pueblo como hiperpotencia que crea un nuevo sistema, en la tercera Constelación, se da el nivel crítico-creador del pueblo.
El misterio.
Es desde luego toda una expedición recorrer las ideas del Dr. Dussel, llevándonos por caminos despejados, otros incitando a descubrirlos por estar solo insinuados. Estos tres tomos de la política de la liberación, no sólo son planteamientos intrínsecos sino extrínsecos, hermenéuticos, simbólicos y muy políticos, son también implícitos y explícitos. Los procesos de colonización tratados en estos tomos, no sólo se encuentran en los actos de la conquista, de la religión, de la epistemología, de la cultura, sino que se aplican también hacia el interior de la producción intelectual de Dussel, es decir, también la dialéctica de la negatividad negativa intenta insertarse en la profundidad de la obra recién aparecida huérfana de Dussel. La dialéctica de la Totalidad se presenta intentando apropiarse del producto intelectual, en una dinámica revisionista, patrimonialista, stalinista. El cuidado y preservación de la obra original se hace impetuosamente obligatoria. El Otro aparece no como Alteridad interpelante exigiendo reconocimiento, sino, como ese otro ventajoso, oportunista, que pretende una apropiación del otro como obra intelectual.
En este tercer tomo de la política de la liberación, Dussel dejó el planteamiento de un misterio, un más allá de la razón y del discurso textual, una otredad de exterioridad, un algo más allá de la comprensión cotidiana, y que exige sea revelado con prontitud. Pero sólo será revelado por la experiencia. La epifanía oculta, material, se asoma inesperadamente, y exige revelar el misterio. El misterio es empírico y está a la vista de quien sabe mirar. La analéctica descubridora del misterio oculto en el tomo tres de la Política de la liberación, nos llevará ineludiblemente ante un deseo a posteriori de Dussel, para pensar desde y para un sujeto que no ha sido reconocido por sí mismo como elegido, yo los llamo “the chosen ones”.
El tercer tomo de la política de la liberación contiene, una pretensión misteriosa de Dussel, es una exigencia desde su misma alteridad, es un llamado al otro, es un cara-a-cara, que reclama descubrir un deseo manifiesto que imperativamente señala una necesidad apremiante. El Otro del que hablo aquí no es el pobre, el Otro es el cercano, el discípulo, el de confiabilidad, el visto con un ojo a posteriori para una tarea especifica y delicada. En este sentido existe un contenido trans-ontológico indicativo destinado a esa alteridad que Dussel construyó pacientemente durante toda su vida y que fue misteriosamente oculta y que plasmó como deseo final en este tercer tomo epifánico.
La comprensión de la totalidad de carácter antropológica de la política de la liberación, oculta, en su interioridad ese misterio que el camino ana-léctico debe descubrir, para no quedar suspendido en la dia-léctica como un caminar de la totalidad en sí misma, y debe trascender, mediante el ejercicio ana-léctico, para ir más allá, hasta estar frente, o cara-a-cara del misterio Dusseliano. Como indica Dussel, “la analéctica no sólo reconoce el rostro sensible del Otro, sino que pone al servicio del Otro un trabajo creador, que parte de la necesidad de Marx”. La oferta oculta en el tercer tomo de la política de la liberación es una oferta de ejercicio analéctico, es poner al servicio del Otro un trabajo creador, es la misma política de la liberación que designa a los continuadores privilegiados del cuidado de la misma obra, es nombrar ocultamente el rostro del Otro y dejar a su servicio un trabajo creador como obra intelectual. Esta necesidad es de Marx, pero más propiamente es la necesidad imperiosa de Dussel como deseo misterioso.
La analéctica antropológica – dice Dussel-, es una económica (un poner a la naturaleza al servicio del Otro) una erótica y una política. Es igualmente un poner la obra intelectual al servicio del Otro, que nunca es uno solo, es un vosotros, una epifanía que revela a los escogidos, a los designados, a los Otros en su cara-a-cara como colectivo que debe conocer su palabra, como revelación y cuidarla, protegerla, difundirla en su real significado original, cuidando de revisionismos con cara de interés comercial. Este señalamiento o búsqueda y demostración del misterio hecho epifanía es a la vez inminentemente apodíctico por encontrarse implícito en la obra misma y más específicamente en este tercer tomo definitivo. Pretendo estar sustentando la irreductibilidad de mi deducción demostrativa a partir de mis propios fundamentos. Por ello, sostengo que mi argumento hipotético es de carácter – ordo cognoscendi a posteriori- de la obra del Dr. Dussel.
Pretensión revisionista.
Recién apareció en el diario La Jornada (01-04-25) una nota extraña anunciando una serie de publicaciones de libros dedicada a la revisión de la obra del Dr. Enrique Dussel, paradójicamente, “por él mismo”. Llama la atención la firma de Katya Colmenares, discípula de Dussel y Ramón Grosfoguel, puertorriqueño del pensamiento colonial/decolonial del poder, y del giro civilizatorio. Ambos se distinguen por la búsqueda obsesionada por descubrir a alguien que supere teóricamente a Dussel y su obra. Primero presentaron a un Dussel grosfogueliano, (ver prólogo de Javier García Fernández al libro ; Al otro lado de la modernidad, ensayo sobre filosofía de la historia; Dussel, Enrique; Edit. Bellaterra, Editions, 2024), después a un Dussel bautistiano. (ver nota de La Jornada, 01-04-25). Pero también se autonombran herederos de la obra filosófica intelectual de Dussel, al declarar que la condición para que la Editorial Akal publicara sus trabajos era que Katya y Grosfoguel dirigieran la Biblioteca Enrique Dussel, (“nos convocó a Ramón Grosfoguel y a mi”). Modernidad/colonialidad, efectivamente, fueron ampliamente tratados por Dussel, pero sus últimas obras son las tres políticas de la liberación y la estética de la liberación, ideas de la última etapa intelectual productiva de Dussel. En ésta última obra, no publicada aún, y por ello inédita, trata el tema “La crítica estética de la totalidad eurocéntrica”, por ello, intuyo, que la colonialidad es grosfogueliana y el eurocentrismo occidentalismo es dusseliano. Como decimos al inicio de esta nota, el tomo 1 de la Política de la liberación expone los siete puntos a superar por esta filosofía política. Y debemos aceptar que la crítica creadora de Dussel no sólo es económica sino civilizatoria y la modernidad es inminentemente colonial, de ahí que la premisa central de esta filosofía sea producir, reproducir y desarrollar la vida a través del proyecto de la transmodernidad, la nueva edad geológica, el ecoceno, o una ecocivilización que supere el antropoceno y que se dé cuenta de que el momento histórico es la vida como imperativo. La crítica creadora es transmoderna, es ana-léctica, busca la justicia social, superar el eurocentrismo, una nueva historia de la humanidad.
Hasta aquí la nota de la publicación. Observamos que el objetivo central consiste en autonombrarse directora de la biblioteca de Dussel; apropiarse de la obra y de los materiales completos, pretensión demasiado delicada puesto que la obra del mismo Dussel en vida nunca fue privada, pues obsequiaba sus libros en internet y los ponía a disposición del público diverso. A lo largo de su vida de docente en las universidades, muchos fueron los discípulos que formó, muchos los que apreció por su habilidad de pensamiento y conocimiento de su obra. Difícilmente encontraremos a uno específicamente preferido por el maestro. Afirmar “nos convocó a Ramón Grosfoguel y a mí”, requiere un acto empírico comprobable. Pues la afirmación tiene sentido sólo en la autoconciencia de ambos autoelegidos y no fuera de ella. Crearon un círculo vicioso contradictorio. La afirmación es sabida sólo en las ideas y muestra el ego cogito ergo sum, el ego conquiro la obra, pienso y mi ego me faculta para autoproclamarme propietario de la obra intelectual, culmina solamente constituyendo una doxa.
Sin embargo, lo anterior configura solamente una disertación crítica intelectual sin la intencionalidad de una radical oposición disruptiva. Tanto la Dr. Katya Colmenares como el Dr. Ramón Grosfoguel son investigadores y promotores de la filosofía de la liberación, una, y, de la colonialidad-decolonialidad, el otro. Pertenecientes ambos a la corriente de pensamiento crítico-creativo. Señalamos que Grosfoguel no ha leído a Dussel en su totalidad, de ahí su debilidad de análisis.
Develación del misterio y la epifanía de Dussel.
El tercer tomo de la política de la liberación, crítica creadora, contiene una estructura intencional, evidente, se trata del descubrimiento del misterio y su develación, ese contenido encubierto se refiere al deseo del Dr. Dussel de invitar a la colaboración no individual, sino colectivamente para escribir esta última obra de la política. A estos invitados intencionales, yo los llamo the chosen twelve. Indicativamente este tercer tomo en comento evidencia el gusto decisivo del Dr. por acercar y señalar a sus doce seguidores preferidos distinguiendo su capacidad, confianza, nivel de estudios, comprensión de su obra. Los colaboradores de esta última obra fueron distinguidos no sólo con la pretensión de escribir un capítulo de la obra, sino con la intención de trascender esa reductiva pretensión y, tal vez, señalarlos para cuidar, analizar, propagar y difundir la obra filosófica total. La epifanía revelada, pienso yo, es la manifestación de depositar a la colectividad de los doce invitados, el destino final de su obra para que, como profetas, inspirados en la obra filosófica y su transmisión al pueblo, enseñando la obra original, comunicando la filosofía de la liberación con sus propias palabras originales.
Los doce elegidos por el Dr. Dussel son, a saber, Alicia Hopkins, Bernardo Cortés, Enrique Téllez, Jorge Zúñiga M., Mario Ruiz S., Gabriel Herrera Salazar, Carlos Núñez, José Guadalupe Gandarilla, Omar García C., Luis Jorge Álvarez, Antonio Wolkmer, Lucas Machado y el número trece, que tiene un llamado especial que hay que descubrir por los doce elegidos, Álvaro García Linera. Existe un contenido oculto mesiánico para los trece invitados a la mesa de la cena como iniciación de la peregrinación que difunde la obra y el pensamiento de Dussel. Es una tarea invitativa de un mesianismo colectivo, nunca ego cogito, nunca privativo y de apropiación individual. La tarea es la búsqueda de la liberación, de la negación de la totalidad, es la hora del horizonte mesiánico de la liberación de la práctica política.
The chosen twelve son indicativa y directamente señalados para una tarea especifica y descomunal, continuar la creación crítica-creadora de la Filosofía de la liberación, cuidando de revisionismos intencionalmente roedores. El autoproclamarse elegido aun estando fuera del designio indicativo de Dussel, es un motivo de desconfianza más si se anuncia un intento revisionista de la obra intelectual filosófica. De ahí que el Instituto de Estudios Dusselianos sea una necesidad histórica-intelectual apremiante y oportuna. Otras respuestas más deberán ir surgiendo que pretendan el cuidado y acrecentamiento de la obra intelectual de la Filosofía de la liberación en su nivel mundial.
Los elegidos, los del misterio y la epifanía indicativa de Dussel, los mencionados por el propio Dussel, son los mesiánicos que deberán liderar la divulgación de la liberación, no como salvadores, sino como seres terrenales poseedores de una filosofía de la exterioridad, del reconocimiento del Otro como negado y que reclama en su interpelación su reconocimiento basado en esta filosofía de la liberación mundial. Un diálogo apremiante surge como necesidad de la unificación de los doce indicados, una re-unión comunitaria de diálogo abierto y serio del papel que deberán jugar en la etapa de un Dussel post mortem. La idea es que estos doce indicativos de Dussel deben reunirse en el corto plazo, dialogar sobre ésta epifanía y desde cada consideración particular y peculiar, establecer un plan estratégico, primero de aceptación de haber sido señalados, después establecer las reglas de la unidad y permanencia de este grupo colectivo, comunitario, para a continuación decidir cómo protegerán la obra filosófica y cómo la divulgarán por el mundo no sólo intelectual, sino la manera de hacerla llegar a los excluidos de la tierra, difusión, reproducción, seminarios, investigaciones, conferencias, y lo necesario para la tarea agotadora, de dar a conocer un pensamiento filosófico que es necesario para la vida de la humanidad presente y futura. La aceptación o el rechazo a esta primicia que sale de una intuición de la lectura del tercer tomo de la Filosofía de la liberación es ya una decisión muy personal y con la libertad que debe contener. Pero mínimamente una primera reunión, de los doce más el treceavo indicado, se debe realizar como un momento histórico que posibilite lo viable o inviable de esta intuición epifaníca.
Corolario:
Fecha de reunión posible de los trece: 05-11-2025: segundo aniversario del fallecimiento del Dr. Dussel.
Fotografía: ambito.com