Top Posts
Silvio Rodríguez: “No me preocupa lo que se...
“Los discursos dominantes sobre los pobres se han...
«TENEMOS QUE DEJAR DE SER MILITANTES ELECTORALES PARA...
El mundo árabe ante el desafío de la...
Hans de Wit y la internacionalización universitaria
Miedo y egoísmo: el círculo vicioso que amenaza...
Bulgaria: Grandes protestas contra el euro
 Reconstruyendo la figura del padre: entre el desprecio...
Franquismo sin Franco
Carrizalillo informa a más de 60 días de...
  • Colectivo Insurgencia Magisterial
Portal Insurgencia Magisterial
Banner
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Calendario de eventos
  • Educooperando
Espacio principalEspacio secundario

A mi madre no la llames comadrona

por La Redacción agosto 12, 2019
agosto 12, 2019
778

Por: Ollantay Itzamná. Alainet. 12/08/2019

Al igual que otras decenas de millones de latinoamericanos, yo nací en una vivienda familiar de mis padres, asistido por una mujer sabia con amplios conocimientos sobre obstetricia, biología, medicina general, ginecología, pediatría, nutrición, socioantropología, etc.

Gracias a la praxis cotidiana de dichos conocimientos cultivados por algunas mujeres, millones de indígenas y campesinos nacemos y convivimos, incluso en contra de la voluntad y/o ausencia del Estado en nuestros territorios.

¿Por qué llamamos comadronas a nuestras médicas?

Ferdinand Saussure, prócer de la lingüística moderna occidental, sostenía que la estructura gramatical de un idioma no era más que la externalización del entramado de la estructura cultural de la comunidad hablante. Es decir, nuestro lenguaje devela la estructura de nuestra cultura.

Cuando en las bicentenarias repúblicas latinoamericanas se sigue utilizando como “normales” términos peyorativos, intencionalmente construidos, para desvirtuar a los “otros” diferentes, ya es innecesario argumentar la condición cultural racista y etnofágica de dichas repúblicas. Y, cuando las y los indígenas “inconscientemente” reproducimos dichos términos vulgares para con los nuestros evidenciamos nuestra condición de colonialidad “normalizada”.

El término comadrona, en el castellano criollo machista, significa chismosa, alcahueta, murmuradora… ¡Nuestras madres y abuelas que ayudan a alumbrar no son nada de eso! Pero, el patriarcado acuñó dicho termino para referirse a las médicas no modernas con la intencionalidad de desvirtuar/anular “otros conocimientos diferentes” y ridiculizar a sus portadoras. Es la cultura e ideología de dominación colonial perpetuada.

¿Por qué mientras ellos (Occidente) tienen obstetras, los indígenas apenas tenemos comadronas? ¿Por qué ellos se autodenominan civilización y a nosotros nos refieren como etnias (costal de huesos)? ¿Por qué a lo que ellos hablan nominan idioma, y a lo nuestro llaman lengua? ¿Por qué su expresión artística es considerada arte y lo nuestro es artesanía? ¿Por qué a su ruido con ritmo llaman música y a lo nuestro folclor? ¿Por qué dicen ellos tener filosofía y a lo nuestro llaman cosmovisión? … Y así, una infinidad de terminologías cotidianamente utilizadas. Ideológica e intencionalmente construidas para perpetuar la dominación.

Llaman comadronas a nuestras madres y abuelas. Simultáneamente instalan en el imaginario colectivo que dichas “prácticas” son peligrosas, sospechosas, antihigiénicas, insalubres… etc. En el mejor de los casos, algunas políticas públicas, para aparentar ser cool, adornan sus apuestas de salud colonial con “comadronas voluntarias”, pero sin salario.

El conocimiento y praxis de nuestras madres y abuelas, es holístico y multidisciplinario. Es anterior a la modernidad, y trasciende a la medicina moderna occidental, hoy, convertida en un negocio letal contra la Vida. Entonces, ¿con qué derecho y autoridad moral se la llama comadrona a sus portadoras?

Dos siglos de aparentes repúblicas, y fallidos procesos de modernización, evidencian que en los países latinoamericanos la “ciudadanía universal” con “derechos universales” sigue siendo aún un mito. El racismo boyante constata que los NO ciudadanos seguimos y seguiremos siendo vistos como “subalternos aniquilables”. Pero, de nosotros y nosotras, indígenas o no, depende que la Vida y sus portadoras se deslicen sobre la civilización de la muerte moderna que aún controla la hegemonía del poder.  Por ello, a nuestras madres y abuelas jamás la debemos llamar comadronas.

-Ollantay Itzamná es defensor latinoamericano de los Derechos de la Madre Tierra y Derechos Humanos

https://ollantayitzamna.com/

@JubenalQ

LEER EL ARTÍCULO ORIGINAL PULSANDO AQUÍ.

Fotografía: Servindi

Compartir 0 FacebookTwitterWhatsapp
La Redacción

noticia anterior
La derecha destruye a nuestros países
noticia siguiente
La superación de las izquierdas ante el inminente colapso planetario

Visitantes en este momento:

449 Usuarios En linea
Usuarios: 24 Invitados,425 Bots

Blog: Perspectivas comunistas

Desde el Plantón magisterial en el Zócalo de la CDMX

Nuestras redes sociales

Blog de la Columna CORTOCIRCUITOS

Nuestros grupos de difusión

Artículos publicados por mes

Síguenos en Facebook

Síguenos en Facebook

Artículos por AUTORES

Artículos publicados por FECHA

junio 2025
L M X J V S D
 1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
30  
« May    

Artículos más leídos esta semana

  • 1

    Del Acuerdo Educativo Nacional al Plan de estudios 2022.

    septiembre 13, 2022
  • 2

    Denuncian “plagio” en el Artículo: “Atribuciones causales del maltrato entre iguales. La perspectiva de los alumnos y del personal de escuelas de enseñanza media básica”

    noviembre 12, 2023
  • 3

    Pago de seguros institucionales: burda simulación de Cuitláhuac.

    octubre 13, 2024
  • 4

    Incongruencias de la NEM de Marx Arriaga: luchar contra el neoliberalismo promoviendo un concurso de Círculos de estudio sobre Freire, con premios de 10 mil pesos a los ganadores y con mecanismos de exclusión

    septiembre 25, 2024
  • 5

    La Casa de los Famosos: ¿es posible no mirar?

    septiembre 19, 2024
  • 6

    REDALYC se deslinda de “Artículo” con denuncia de “plagio”

    noviembre 14, 2023
  • 7

    Ekaitz Cancela, autor de Utopías digitales: Imaginar el fin del capitalismo: “El diseño de la tecnología no es asunto exclusivo de las startups con sede en Silicon Valley”

    septiembre 17, 2024
  • 8

    Milei, una bomba de tiempo.

    diciembre 3, 2023
  • 9

    DESPUÉS DEL DÍA 1, ¿QUÉ ES LO QUE VIENE PARA EDUCACIÓN?

    octubre 4, 2024
  • 10

    Emilia Ferreiro, una y múltiple

    octubre 1, 2024
  • 11

    La revolución del amor vs la cobardía reaccionaria

    septiembre 27, 2024
  • 12

    La verdad sobre los 43 tras los muros del 27 batallón del ejército

    septiembre 24, 2024
  • 13

    Pirelli-Silao obstruye libre asociación a trabajadores, CTM cómplice: denuncian

    agosto 27, 2024
  • 14

     Reforma judicial: transición de la partidocracia a la coprocracia*.

    septiembre 15, 2024

Rolando Revagliatti. Argentina

Raúl Allain. Perú

Juan Antonio Guerrero O. México

Vanesa Monserrat. Argentina

Carolina Vásquez Araya

Ilka Oliva-Corado

Javier Tolcachier

Columna: CORTOCIRCUITOS

Manuel I. Cabezas González

Luis Armando González

Iliana Lo Priore

Jorge Salazar

Adolfo del Ángel Rodríguez

Oswualdo Antonio G.

José Eduardo Celis

Daniel Suárez

Güris J. Fry

Jorge Díaz Piña

Ángel Santiago Villalobos

Andrés Brenner

Alejandra Cortina

José Carlos Buenaventura

Luis Palacios

@2020 - Insurgencia Magisterial

Portal Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Calendario de eventos
  • Educooperando
Portal Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Calendario de eventos
  • Educooperando
@2020 - Insurgencia Magisterial