Anarquismo<-Neoliberalismo<-Capitalismo <—>Socialismo->Comunismo->Anarquismo.
Jorge Salazar García. 3/12/23
De no haber triunfado con 10 punto porcentuales de diferencia, no valdría la pena escribir una sola palabra sobre el nuevo presidente de Argentina, Javier Milei, (JM), candidato de “La Libertad Avanza” que obtuvo el 55.6 % de los votos el 19 de noviembre pasado. Otra razón para hacerlo, es que este personaje fue posicionado por la mercadotecnia como “El Salvador” de Argentina. Cuando claramente es un mercenario de ese 1% de supermillonarios que, despojados de cualquier escrúpulo humanitario, joden al mundo con su codicia. Sin duda este sujeto, gobernando, causará mucho sufrimiento profundizando la explotación y la desigualdad. Su ascenso repercutirá en América Latina, sobre todo en México donde habrá elecciones.
Dada la confrontación del Capitalismo y el Socialismo, ideologías vigentes en el mundo, la complejidad del fenómeno Milei es enorme. Un artículo no bastaría siquiera para describir la personalidad de alguien que dice hablar con el espíritu de su perro. Al que por cierto nombró “Friedman”, en honor del creador del Neoliberalismo. Esto obliga a centrar el análisis en aspectos que, desde nuestra perspectiva, contribuirán a entender lo ocurrido en las elecciones argentinas y a visualizar algunas consecuencias que, sin duda, como una bomba de tiempo nos explotarán en la cara. Hoy Argentina no llorará por sus ciudadanos, estos llorarán por ella*.
Para poder esclarecer el significado de “capitalista libertario” o anarco capitalista adjetivos que el mismo JM se adjudica, será necesario explicar antes, sintéticamente, qué es y propone el CAPITALISMO como sistema. Después se aventurarán hipótesis del por qué votaron por Milei los trabajadores argentinos, sus semejanzas con la clase media mexicana. Se abordarán también algunos posibles efectos en los jóvenes, potenciales votantes en la próxima elección presidencial en México. Primero veamos qué eso de los “ismos”.
Los “ismos”
Cualquier “ismo” (doctrina, sistema o movimiento) político plantea una manera de organizar el poder, la sociedad, la economía y la propiedad de los medios de producción, esencialmente. Los hay de izquierda y de derecha. Todos hablan de Libertad, Justicia, bienestar, felicidad, derechos, básicamente. Cada uno, a su modo, concibe necesario al Estado para armonizar los intereses sociales. A excepción de los ANARQUISMOS que proponen desaparecer al Estado.
En el epígrafe se muestra un esquema sintetizado, propio, con una dirección temporal hacia la evolución y otra hacia la regresión. Los “ismos” surgidos del CAPITALISMO conducen a la explotación de muchos por pocos que se creen superiores. Al contrario, los derivados del SOCIALISMO, se proponen terminar con la explotación, privilegiando lo colectivo. Hasta el momento, están vigentes el capitalismo y el socialismo. El primero derrotó al segundo durante la guerra fría. ¿Por qué? Siga leyendo y seguramente descubrirá la respuesta a esta pregunta.
Capitalismo
El comercio y los intercambios siempre han estado presentes en la Historia no así el Capitalismo, cuyo origen puede ubicarse en el siglo XVII. Antes de éste, la forma de organizar la sociedad y la economía se le llamaba Feudalismo. Gobernaba un Rey aliado a la nobleza, el clero y los señores feudales. Estos últimos, concesionario de las tierras, hacía obedecer y trabajar a los siervos, plebe y esclavo, conforme lo dictaba el Rey. Más tarde, los artesanos y comerciantes, organizados en los burgos (ciudades o Villas), al apropiarse del capital y las tierras conformaron la burguesía. La consolidación de este poder económico y el desarrollo industrial, redujeron las clases feudales a dos: capitalistas y proletarios. En 1776, a partir de la publicación del libro “La Riqueza de la Naciones” de Adam Smith, nace el pensamiento burgués del Liberalismo Económico, del cual se extraen los fundamentos teóricos del CAPITALISMO. Éste, inicialmente, trajo mejoras sociales, mayor libertad y mejor reparto de la riqueza. Desplaza al feudalismo creándose un Estado moderno, donde las dos clases mencionadas quedan representadas en un parlamente cuyos miembros son electos “democráticamente”.
Entre los principales teóricos del capitalismo, están Adam Smith, David Ricardo y Jackes Turgot, Joan Stuart Mills. Esencialmente justifican la propiedad privada, la concentración de la riqueza y la libertad individual para producirla sin la intervención del Estado.
De la obra “La Riqueza de las Naciones” se transcriben resumidos los 4 postulados de su teoría.
a) El lucro (codicia) es un impulso natural.
b) Es natural que los esfuerzos individuales se conjuguen para lograr el bien social.
c) El desarrollo económico debe seguir su propio curso, sólo conducido por la mano invisible reguladora del mercado a través de la oferta y la demanda.
d) Como esto es bueno y perfecto, sólo Dios que creó un Universo a su imagen y semejanza, pudo inspirarlo.
El capitalismo fue llevada al terreno de los hechos en los Estados Unidos. Desde su independencia (1776) los líderes de los colonos europeos, respaldados por los banqueros descendientes de los burgueses, lo adoptaron como su sistema de gobierno. Asumieron (d) que Dios los había elegido por ser una “nación emprendedora y ordenada” (b) para llevar la civilización a los salvajes quienes tenían formas de organización colectivas. Afirmaban (lo siguen haciendo) que esas naciones eran pobres por tener demasiados seres parasitarios que no producen riqueza y que por esa razón se ven obligados a matar a hijos, ancianos, enfermos o dejarlos a que mueran de hambre o devorados por las fieras”. Y eso en la naciones emprendedoras no sucede.
Para los capitalistas, son improductivos quienes no acumulan capital. Como en las naciones “civilizadas” también hay seres improductivos, lo justifican argumentando que el Estado no estimula suficientemente el egoísmo (a) y limita a los codiciosos. Si lo hiciera, la riqueza generada por los productivos se desparramarías hacia abajo, beneficiando a los improductivos. Gran parte de los admiradores de los yanquis, que tiene menos de 35 años, identifican a los productivos con los empresarios, patrones o ricos. Esas nuevas generaciones, adoctrinadas por Hollywood, aceptan esa excluyente concepción clasista, asumiendo que los improductivos son los trabajadores, (abogados, burócratas, maestros, escritores, artistas, militares, sacerdotes, músicos, comerciantes etc.), y, por supuesto, los políticos.
Aunque el Capitalismo fue revolucionario en sus inicios, ni la libre competencia ni la “mano invisible” (c) mencionadas han existido nunca debido a los monopolios que lo impiden. Cada capitalista, centrado en su egoísmo, intenta aplastar al competidor, explotar al máximo a los trabajadores y extraer los bienes del Estado. Es FALSO, por ejemplo, que paguen impuestos. Realmente los roban reclamando devoluciones por gastos que generalmente o no ocurrieron o los inflaron con técnicas evasivas de contabilidad y fundaciones. Se apropian de la riqueza que producen los trabajadores, comerciantes, pequeños empresarios, a quienes les aplican impuestos sobre el ingreso, (renta), el consumo y los servicios.
Los intelectuales, científicos, filósofos más inteligentes del mundo han descubierto que capitalismo lleva el germen de la destrucción pues es imposible acumular al infinitum cuando los recursos son limitados. Exalta lo peor del Ser humano, pues la acumulación de riqueza requiere despojarlas a otros. Lo anterior explica por qué durante casi 250 años de existencia sólo ha traído guerras, explotación, miseria, sufrimiento y genocidios.
Neoliberalismo
El capitalismo, llevado al extremo, dio lugar al Neoliberalismo, cuya tesis central consiste en limitar al máximo la intervención del Estado. Milton Friedman, (1912-2006), considerado el padre del Neoliberalismo, fue asesor de Donald Reagan, Margaret Thatcher, Pinochet, etc. La acción estatal, dicen, debe restringuirse a proporcionar seguridad a los negocios disminuyendo el gasto social, los derechos laborales, fomentando el mercado, administrando justicia y privatizando la educación, la salud, carretera, playas, bosques y demás bienes de la Nación.
Este escalamiento del capitalismo fue fríamente diseñado por la élite económica. El “Conceso de Washington” resumió las recetas neoliberales planeando reformar estructuralemente al Estado. Sus recetas se aplicaron en Chile después de un golpe militar sangriento, (1973), encabezado por el general Augusto Pinochet, (1973), asesorado por Henry Kissinger. En México se impuso mediante el fraude electoral de 1988 operado por Manuel Bartlett, (golpe blando). Carlos Salinas de Gortari, (usurpador), planeó concluir esas reformas en 2018, calificadas como irreversibles por el candidato del PRI, Antonio Meade. Completadas las reformas, la estructura jurídica e institucional fue puesta al servicio de los empresarios. El poder económico se fundió con el poder político nulificando el poder social
Capitalismo libertario.
Con este oxímoron se identifica Milei quien también se dice anarco capitalista, algo inexistente e imposible. A los oídos de los jóvenes argentinos adoctrinados en el consumismo, individualismo, emprendedurismo, cuyo único objetivo vital es hacerse ricos sin importar nadie ni nada más, suena a canto de sirenas. ¿A quién no le parecería maravilloso acabar con los políticos rateros parasitarios y ser millonario? Pero esto y los demás pendientes se abordarán en los próximos artículos.
*Parafraseo del título de canción de Andrew Lloyd “No llores por mi Argentina”.