Por: Oswualdo Antonio González. 07/06/2021
Una debilidad de MORENA radica en la incapacidad mostrada, en traducir su plataforma electoral en Programa de Gobierno.
Los diversos candidatos que desde 2018 ganaron sus respectivas elecciones con las siglas de MORENA, no fueron capaces de impulsar plataformas de gobierno que pudieran ser catalogadas como de izquierda, ni disputar en el espacio público la percepción que la ciudadanía tenía de ellos como ineficientes, represivos, autoritarios o contrarios a diversos derechos.
Los legisladores que concluyen sus gestiones no lograron establecer una agenda que tradujera en iniciativas sus promesas electorales o las propuestas o intereses de sus votantes.
El reto del Plan de gobierno
La selección de candidatas y candidatos en MORENA no priorizó el impulso de cuadros internos, optó por negociaciones con diversos grupos de poder y ahora que ya ganaron muchos de ellas y ellos, la pregunta es si MORENA como partido logrará influir en el diseño de los Programas de Gobierno de Presidentes municipales y Gobernadores. Este es el primer reto.
El reto de la Agenda legislativa
A diferencia del 2018, la mayoría de las y los candidatos a diputados federales no presentaron plataforma legislativas, en su lugar se impulsó el dicho que se pedía el voto para aprobar las iniciativas del Presidente de la República. Todo apunta a que no habrá una agenda legislativa de MORENA, en su lugar se impulsará la agenda de la Presidencia de la República. ¿Cómo afectará esta sumisión del legislativo y su nula relación con los ciudadanos las próximas elecciones presidenciales?
Fotografía: elsudcaliforniano