Top Posts
Entrevista a Magdalena Grabowska y Marta Rawłuszko: El...
Desigualdad y Pobreza: Chile y el mundo en...
El renovado formato de la vieja derecha latinoamericana
La destrucción del tejido social y la cultura...
Perú: Cuando Garabombo se hace visible
Nació la Celac Social con el protagonismo de...
Un pueblo en lucha para habitar sus tierras...
La necesaria solidaridad intergeneracional
El bloqueo estadounidense a Cuba perjudica a pacientes...
Noam Chomsky: «El statu quo puede ser desafiado, un mundo...
  • Colectivo Insurgencia Magisterial
Insurgencia Magisterial
Banner
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Micropolíticas del vivir
Espacio principalEspacio secundario

MASACRE QUE NO SE FILTRA, NO EXISTE

por RedaccionA noviembre 30, 2021
noviembre 30, 2021

Por: Jorge Majfud. 30/11/2021

«Si las guerras pueden comenzar con mentiras, la paz bien puede comenzar con la verdad».
Julian Assange.

El 8 de marzo de 2019, los analistas de un comando militar estadounidense localizado en la millonaria península de Catar se encontraban observando una calle de un pueblo pobre en Siria a través de imágenes de alta definición captadas por un dron inteligente. En la conversación que quedó grabada, los analistas reconocieron que la multitud estaba compuesta mayormente por niños y mujeres. A un costado, un hombre portaba un arma, pero todo parecía desarrollarse de forma tranquila. Hasta que una bomba de 220 kilogramos fue arrojada desde un poderoso F-15E, justo sobre la multitud. Doce minutos más tarde, cuando los sobrevivientes de la primera bomba comenzaban a correr o a arrastrarse, el mismo avión arrojó dos bombas más, esta vez de una tonelada de explosivos cada una y a un costo de un millón de dólares por explosión.

A 1870 kilómetros, en el Centro de Operaciones Aéreas Combinadas del ejército estadounidense en la base de Al Udeid en Catar, los oficiales observaron la masacre en vivo. Alguien en la sala preguntó, sorprendido, de dónde había partido la orden.

Al día siguiente, los observadores civiles que llegaron al área encontraron casi un centenar de cuerpos destrozados de niños y mujeres. La organización de derechos humanos Raqqa Is Being Slaughtered publicó algunas fotos de los cuerpos, pero las imágenes satelitales sólo mostraron que donde cuatro días atrás había un barrio modesto sobre el río Eufrates y en un área bajo el control de la «coalición democrática», ahora no quedaba nada. La Oficina de Investigaciones Especiales de la Fuerza Aérea de Estados Unidos se negó a explicar el misterio.

Luego se supo que la orden del bombardeo había procedido de un grupo especial llamado «Task Force 9», el cual solía operar en Siria sin esperar confirmaciones del comando. El abogado de la Fuerza Aérea, teniente coronel Dean W. Korsak, informó que muy probablemente se había tratado de un «crimen de guerra». Al no encontrar eco entre sus colegas, el coronel Korsak filtró la información secreta y las medidas de encubrimiento de los hechos a un comité del Senado estadounidense, reconociendo que, al hacerlo, se estaba «poniendo en un serio riesgo de represalia militar». Según Korsak, sus superiores se negaron a cualquier investigación. «La investigación sobre los bombardeos había muerto antes de iniciarse», escribió. «Mi supervisor se negó a discutir el asunto conmigo».

Cuando el New York Times realizó una investigación sobre los hechos y la envió al comando de la Fuerza Aérea, éste confirmó los hechos pero se justificó afirmando que habían sido ataques necesarios. El gobierno del presidente Trump se refirió a la guerra aérea contra el Estado Islámico en Siria como la campaña de bombardeo más precisa y humana de la historia.

El 13 de noviembre el New York Times publicó su extensa investigación sobre el bombardeo de Baghuz. De la misma forma que esta masacre no fue reportada ni alcanzó la indignación de la gran prensa mundial, así también será olvidada como fueron olvidadas otras masacres de las fuerzas de la libertad y la civilización en países lejanos.

El mismo diario recordó que el ejército admitió la matanza de diez civiles inocentes (siete de ellos niños) el 10 de agosto en Kabul, Afganistán, pero este tipo de reconocimiento público es algo inusual. Más a menudo, las muertes de civiles no se cuentan incluso en informes clasificados. Casi mil ataques alcanzaron objetivos en Siria e Irak solo en 2019, utilizando 4.729 bombas. Sin embargo, el recuento oficial de civiles muertos por parte del ejército durante todo el año es de solo 22. En cinco años, se reportaron 35.000 ataques pero, por ejemplo, los bombardeos del 18 de marzo que costaron la vida a casi un centenar de inocentes no aparecen por ninguna parte.

En estos ataques, varias ciudades sirias, incluida la capital regional, Raqqa, quedaron reducidas escombros. Las organizaciones de derechos humanos informaron que la coalición causó miles de muertes de civiles durante la guerra, pero en los informes oficiales y en la prensa influyente del mundo no se encuentran, salvo excepciones como el de este informe del NYT. Mucho menos en los informes militares que evalúan e investigan sus propias acciones.

Según el NYT del 13 de noviembre, la CIA informó que las acciones se realizaban con pleno conocimiento de que los bombardeos podrían matar personas, descubrimiento que podría hacerlos merecedores del próximo Premio Nobel de Física.

En Baghuz se libró una de las últimas batallas contra el dominio territorial de ISIS, otro grupo surgido del caos promovido por Washington en Medio Oriente, en este caso, a partir de la invasión a Irak lanzada en 2003 por la santísima trinidad Bush-Blair-Aznar y en base a las ya célebres mentiras que luego vendieron como errores de inteligencia. Guerra que dejó más de un millón de muertos como si nada.

Desde entonces, cada vez que se sabe de alguna matanza de las fuerzas civilizadoras, es por alguna filtración. Basta con recordar otra investigación, la del USA Today que hace dos años reveló los hechos acontecidos en Afganistán el 22 de agosto de 2008. Luego del bombardeo de Azizabad, los oficiales del ejército estadounidense (incluido Oliver North, convicto y perdonado por mentirle al Congreso en el escándalo Irán-Contras) informaron que todo había salido a la perfección, que la aldea los había recibido con aplausos, que se había matado a un líder talibán y que los daños colaterales habían sido mínimos. No se informó que los habían recibido a pedradas, que habían muerto decenas de personas, entre ellos 60 niños. Un detalle.

Mientras tanto, Julian Assange continúa secuestrado por cometer el delito de informar sobre crímenes de guerra semejantes. Mientras tanto los semidioses continúan decidiendo desde el cielo quiénes viven y quiénes mueren, ya sea desde drones inteligentes o por su policía ideológica, la CIA. Este mismo mes, la respetable cadena de radio estatal de Estados Unidos, NPR (no puedo decir lo mismo de la mafia de las grandes cadenas privadas), ha reportado que hace un año la CIA debatió entre matar o secuestrar a Julian Assange.

La conveniente, cobarde y recurrente justificación de que estos ataques se tratan de actos de «defensa propia» es una broma de muy mal gusto. No existe ningún acto de defensa propia cuando un país está ocupando otro país y bombardeando inocentes que luego son etiquetados como «efectos colaterales».

Está de más decir que ninguna investigación culminará nunca con una condena efectiva a los responsables de semejantes atrocidades que nunca conmueve a las almas religiosas. Si así ocurriese, sólo sería cuestión de esperar un perdón presidencial, como cada mes de noviembre, para Acción de Gracias, el presidente estadounidense perdona a un pavo blanco, justo en medio de una masacre de millones de pavos negros.

Nadie sabe y seguramente nadie sabrá nunca los nombres de los responsables de esta masacre. Lo que sí sabemos es que en unos años volverán a su país y lucirán orgullosas medallas en el pecho que sólo ellos saben qué significa. Sabemos, también, que al verlas muchos patriotas les agradecerán «por luchar por nuestra libertad» y les darán las gracias «por su sacrificio protegiendo este país». Muchos de estos agradecidos patriotas son los mismos que flamean la bandera de la Confederación en sus 4×4, el único grupo que estuvo a punto de destruir la existencia de este país en el siglo XIX para mantener «la sagrada institución de la esclavitud».

Tradición que nunca murió. Sólo cambió de forma.

*Jorge Majfud es escritor uruguayo-estadounidense. Profesor en la Jacksonville University.

24/11/21 P/12

LEER EL ARTICULO ORIGINAL PULSANDO AQUÍ

Fotografía: El ortiba

149
Compartir 0 FacebookTwitterWhatsapp
RedaccionA

noticia anterior
OMISIÓN, INOPERANCIA Y DISCRIMINACIÓN DE LAS AUTORIDADES FEDERALES Y DE LA CDMX, AL ELUDIR LA DEFENSA DE LOS BOSQUES DE LA COMUNIDAD DE TOPILEJO
noticia siguiente
La Silla Vacía abre camino al uso de inteligencia de fuentes abiertas en la región con video reportaje de reconstrucción

También le podría interesar

Rusia, Siria y Türkiye sostienen conversaciones en Moscú

enero 4, 2023

SIRIA rompe relaciones diplomáticas con Ucrania por su...

julio 30, 2022

Siria se une a la Ruta de Seda...

enero 28, 2022

Visitantes en estos momentos:

202 Usuarios En linea
Usuarios: 50 Invitados, 152 Bots

Evento gratuito

Amador Fernández Savater en AUDIO

cba24n.com.ar · Después del Fin | por Amador Fernández Savater y Agustina Beltrán Peirotti

Artículos publicados por FECHA

enero 2023
L M X J V S D
 1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031  
« Dic    

Artículos por AUTORES

Fundación de los comunes

Fundacion de los Comunes · EL FUTURO NO ESTÁ ESCRITO. Organizarse en la crisis del capitaloceno

Traficantes de sueños

Traficantesdesueños · El Consenso de Wall Street. Rutas y ruinas del capitalismo verde.

Artículos más leídos esta semana

  • 1

    La necesaria solidaridad intergeneracional

    enero 26, 2023
  • 2

    Perú: Cuando Garabombo se hace visible

    enero 26, 2023
  • 3

    El renovado formato de la vieja derecha latinoamericana

    enero 26, 2023
  • 4

    La destrucción del tejido social y la cultura de la guerra

    enero 26, 2023
  • 5

    Nació la Celac Social con el protagonismo de organizaciones de la región

    enero 26, 2023
  • 6

    Un pueblo en lucha para habitar sus tierras y espacios sagrados

    enero 26, 2023
  • ¿Cuáles son los elementos de una historieta?

    febrero 15, 2017
  • 8

    El bloqueo estadounidense a Cuba perjudica a pacientes médicos de ambos países

    enero 26, 2023
  • 9

    Desigualdad y Pobreza: Chile y el mundo en manos de una pequeña élite

    enero 26, 2023
  • 10

    Argentina. Análisis político: Los sectores marginados podrían ver en el escenario de la contienda electoral un tiempo propició para manifestar sus justas reclamaciones.

    enero 25, 2023
  • 13 Libros gratis de Pierre Bourdieu: habitus, campo social, capital simbólico e instituciones

    enero 31, 2016
  • 12

    Disforia educativa

    junio 1, 2022
  • 13

    Entrevista a Magdalena Grabowska y Marta Rawłuszko: El feminismo polaco en el umbral de una revolución

    enero 26, 2023
  • 14

    Me caí del mundo y no sé cómo se entra – Eduardo Galeano.

    septiembre 26, 2018

Rolando Revagliatti. Argentina

Vanesa Monserrat. Argentina

Juan Antonio Guerrero O. México

Raúl Allain. Perú

Carolina Vásquez Araya

Ilka Oliva-Corado

Columna: CORTOCIRCUITOS

Javier Tolcachier

Manuel I. Cabezas González

Luis Armando González

Jorge Salazar

Adolfo del Ángel Rodríguez

Oswualdo Antonio G.

Iliana Lo Priore

José Eduardo Celis

Daniel Suárez

Güris J. Fry

Jorge Díaz Piña

Ángel Santiago Villalobos

Andrés Brenner

Alejandra Cortina

José Carlos Buenaventura

Luis Palacios

BIBLIOTECA de ÁBACOenRed

Suscríbete

Acepta recibir notificaciones

@2020 - Insurgencia Magisterial

Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Micropolíticas del vivir
Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Micropolíticas del vivir
@2020 - Insurgencia Magisterial

Leer también:x

La victoria de la oposición en Estambul...

julio 15, 2019

Mueren 56 civiles en Siria por los...

julio 21, 2016

Rusia, Siria y Türkiye sostienen conversaciones en...

enero 4, 2023