Por: Cristóbal León Campos. 15/06/2025
Las bombas sobre objetivos civiles y nucleares en Irán y el discurso amenazante del sionismo israelí y del imperio estadounidense nos dirigen a una crisis mayor de humanidad, que hoy ya alcanza una situación alarmante. La respuesta de Irán a las agresiones de Israel y el intercambio de ataques en ambos territorios tensa la cuerda, y nos acerca a una guerra de escala regional y que pudiera llevarnos a una conflagración global, como aquella de generó el Holocausto judío que hoy se reproduce por el sionismo contra Palestina. Estamos a punto de una nueva guerra de conquista y colonización que para el siglo XXI viene a representar el regreso del oscurantismo y de una época de violencia sistémica que no reparará en los daños y en los efectos colaterales, el reacomodo geopolítico y económico ha abierto ya una etapa de violencia imperialista con la participación de las grandes potencias y de las regiones económicas más codiciadas en el presente.
A la escalada genocida en Palestina y la deportación de la mayoría de los integrantes de la FLOTILLA DE LA LIBERTAD que buscaba romper el cerco en Gaza y llevar un poco de ayuda humanitaria (tres de los integrantes de la FLOTILLA siguen detenidos), ahora se suma la represión que se vive en estas horas en Egipto, cuyo gobierno aliado de Estados Unidos está deteniendo, secuestrando, deportando y reprimiendo a centenares de activistas y participantes de la MARCHA POR GAZA con representantes de más de 80 países, que para este día 15 de junio programó el inicio de su llegada a Gaza, como una forma de superar el cerco genocida que el ejército sionista de ocupación impuso desde tiempo atrás. Y a pesar de todos estos hechos atroces aún hay quien sigue “dudando” del genocidio y del rostro neofascista de Benjamin Netanyahu y su gobierno.
En las últimas semanas Israel a bombardeado Palestina, Yemen, El Líbano, Siria y ahora Irán, cinco países, y sin que la ONU, la OTAN, la Unión Europea y demás organizaciones internacionales que “hablan de libertad y democracia” tomen medidas reales contra estos crímenes de lesa humanidad, ya que no basta con discursos ambiguos ni eufemismos distractores; la humanidad necesita poner alto a la violencia sionista e imperialista y avanzar hacia la armonía de las naciones, aunque esto sea muy difícil mientras exista el imperialismo y los fundamentalismos como el sionismo.
El discurso sionista es sumamente hipócrita, pues ahora que Irán responde a la agresión iniciada por Israel y habla de su derecho a defenderse, el sionismo utiliza esa respuesta como una estrategia de reorganización interna de su sociedad, esto apelando a un nacionalismo frente a la “agresión terrorista”, justo de la misma forma en que el imperialismo estadounidense se ha “justificado” por siglos a la hora de cometer sus crímenes de lesa humanidad, siendo, además, una estrategia para ganar consenso social a favor del gobierno de Netanyahu que se ha visto cuestionado y rechazado por sectores importantes de su sociedad. Pareciera que hemos entrado en la época del absurdo, pero eso es lo que desean que pensemos mientras nos hostigan con propaganda manipuladora, quieren justificar lo injustificable para así alcanzar sus objetivos inhumanos y satisfacer su avaricia colonizadora y su sed de sangre genocida.
En estas horas, junto a las noticias sobre la represión a la MARCHA POR GAZA, llegan también informes sobre la movilización de efectivos (soldados, barcos, aviones, etc.) de los ejércitos de Estados Unidos y Reino Unido en apoyo a Israel en sus agresiones contra Irán, ¿y aun así hay quien sigue jurando que Estados Unidos es la democracia a seguir para el mundo? Donald Trump, desde las primeras imágenes del ataque sionista a Irán, celebró las acciones militares y dejó claro que el imperialismo estadounidense está con el sionismo y, aunque ya se sabía, esto sirve para romper los discursos mediáticos que quieren hacernos creer que Occidente vela por los derechos humanos y protege al mundo de la barbarie; pero la barbarie tiene cuna en Occidente y se extiende por el mundo.
La guerra que Israel y los Estados Unidos quieren, junto a sus aliados europeos y de Medio Oriente, NO ES NUESTRA. No es por el bien de la humanidad ni es para protegernos de ninguna amenaza, sólo es para la continuidad del neocolonialismo y la repartición de territorios ocupados y despojados. Es para el exterminio de pueblos, naciones y culturas diferentes a Occidente y que no se han sometido a sus intentos de mandato. Lo que hoy el sionismo y el imperialismo ataca es la resistencia de los pueblos como el palestino y el iraní por defender sus derechos a ser, a existir, a preservar su cultura y desarrollarse en libertad, sin imperios que los opriman ni sionismo que los exterminen.
¡NO A LA GUERRA EN MEDIO ORIENTE!
¡NO AL GENOCIDIO DEL PUEBLO PALESTINO!
¡VIVAN EN LIBERTAD LOS PUEBLOS DEL MUNDO!
Fotografía: La Sexta