Por: José Yorg. 09/08/2024
“El sistema capitalista estructuró sus posibilidades estatales y sus posibilidades nacionales en la economía”. Perón.
“Además de eso, compañeros, cuando nosotros hemos luchado contra el individualismo, no lo hemos hecho porque el individualismo represente para nosotros una palabra poco simpática. Lo hemos hecho porque sabemos que el individualismo es la base del sistema capitalista y que cuando queremos destruir al sistema capitalista tenemos que empezar por destruir la causa, que es el individualismo”. Perón.
“Aún con todas sus farsas, penalidades y sueños fallidos, el mundo es todavía hermoso”. Poema desiderata.
Para explicar nuestro punto de vista y expresar que, aunque parezca una locura decirlo hoy, vamos a un nuevo y mejor mundo, nos afirmamos esta vez en el pensamiento de Bernard Lavergne (1884- 1975) quien nació en Nimes, Francia, fue profesor de las universidades francesas de Lille y de París, autor de varios e importantes libros como “El socialismo con rostro humano” (1971), “El orden cooperativo” (1926), “El problema de las nacionalizaciones” (1946), “La revolución cooperativa o el socialismo de Occidente” (1962) y “El socialismo cooperativo” (1955).
Fijamos las fechas en sus obras con el propósito de ubicarnos en el contexto histórico en que Lavergne expuso sus ideas, específicamente en “La revolución cooperativa”.
“Es suficiente abrir los ojos para percibir que la humanidad va hacia un mundo nuevo, después de las dos últimas guerras las naciones experimentan una mutación cada día más brusca; las normas que durante siglos permanecieron inmutables son puestas en duda y revocadas; la revolución está en las cosas y en los espíritus”.
El cambio, la mutación, la transformación, en el seno de la humanidad es poco percibida y menos comprendida porque aún no se ha manifestado en todo su esplendor, “sin embargo-como dijo el genio- “se mueve”, las protestas de insatisfacción social donde quiera que sea en el mundo son síntomas de que, a pesar de todo, la humanidad se encamina, por ahora, subjetivamente, a un nuevo y mejor mundo.
El capitalismo, en última fase financiera, por medio de sus beneficiarios trata en Davos de resetear o reiniciar con otro ropaje el capitalismo, y allí está el actual gobierno argentino con su batalla contracultural para intentar modificar o contornear un capitalismo en permanente crisis.
Aquí está expuesto la contradicción histórica entre el nuevo mundo y el viejo mundo, magníficamente enseñado por Antonio Gramsci “El viejo mundo se muere, el nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos”.
Estamos en una época claramente de crisis civilizatoria del sistema capitalista. Y entonces nos preguntamos con Lavergne ¿Cuál será el mundo de mañana?
Inaugurar un cooperativismo transformador de realidades ya perimidas.
“La única verdad es la realidad” dijo Perón, pero nosotros nos permitimos agregar que “La única verdad es la realidad transformable”.
Según un informe elaborado en el año de 2022 por el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), órgano oficial de control y apoyo, existen 15.082 cooperativas y 3.785 mutuales en nuestro país. Tienen presencia en el 90% de las localidades argentinas.
Sin dudas es, potencialmente, una red fuerte económicamente, pero debemos decirlo como crítica sana y positiva que no han construido poder político cooperativo, sin lo cual no se posee poder de incidencia benéfica en los estamentos de gobierno y en las mentes y corazones del pueblo.
Otra debilidad del movimiento cooperativo argentino, producto de la falta de poder político para incidir, es el campo educativo, existen muchas leyes de promoción pero no tienen efectividad, no se cuenta con un órgano nacional que promueva la educación cooperativa escolar y universitaria, contando sí con esfuerzos dignos pero sin articulación.
Hemos descripto otra gran contradicción, en este caso una contradicción cooperativa porque el cooperativismo posee gran presencia pero carece de construcción de poder político cooperativo, insistimos. Esta contradicción debe ser resuelta creativamente para inaugurar un cooperativismo transformador de realidades ya perimidas.
Está claro que, como afirmó Perón “El sistema capitalista estructuró sus posibilidades estatales y sus posibilidades nacionales en la economía”, el cooperativismo debe estructurar su poder político para lograr “estructurar sus posibilidades estatales y sus posibilidades nacionales en la economía”, simple.
¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!
Fotografía: José Yorg