Por: Roberto González Villarreal, Lucía Rivera Ferreiro, Marcelino Guerra Mendoza. 12/07/2019
Hay una violencia que pasa desapercibida, ignorada, pero inmanente a los grandes discursos, los procedimientos técnicos o las rutinas políticas: la violencia epistémica.
Es una violencia muda, más frecuente de lo que suponemos; comprende todos los procedimientos que invisibilizan, desvalorizan, extinguen, alteran y/o tergiversan modos de vida, de pensamiento, instituciones o valores de individuos y colectivos. Es uno de los conceptos clave del pensamiento decolonial y feminista (Spivak, Can the subaltern speak? ; Said, Permission to narrate).
Repetimos: es más frecuente de lo que creemos, se oculta en las prácticas rutinizadas de la ciencia, la academia, la política o las instituciones. Está presente en todas, TODAS ellas. Estar atentas y atentos es una precaución elemental de las resistencias.
No se puede emancipar nada ni nadie, si se reproduce la violencia epistémica contra quien sea. Difícil de concebir, es cierto, porque muchas veces se disfraza tras los discursos de la unidad, de la Línea, de los caminos únicos, aunque se exprese en una multitud de epítetos cotidianos: divisionismo, desviaciones, enemigos…
Una de las formas de la violencia epistémica es la regulación de las interpelaciones: ¿Quién pregunta? ¿Qué preguntas son pertinentes? ¿Cuáles son peligrosas? ¿Cómo y para quién es peligroso un cuestionamiento?
Preguntar es un acto político, pone en duda los discursos del poder, no solo los de su ejercicio, sino los de su estrategia, su razón, su existencia. De hecho, aceptar la pregunta desata la lucha, interpela la legitimidad, ensombrece las producciones, del poder y del saber; por eso se vuelve tan peligroso, por eso se dirigen las dudas, se tamizan, se modifican, se ignoran, se desvalorizan, se subsumen, se tergiversan… Preguntar es peligroso. Por eso mismo, no solo se callan las preguntas, sino se administran, se tutelan, se cortan, se niegan, se trozan, se trucan, se truecan. La violencia epistémica tiene un arsenal enorme, recordemos, lleno de guadañas y de hoces, de pequeñas tijeras, cutters, reglas, diccionarios, marcos. No solo corta, sobre todo tergiversa, desvaloriza, olvida, niega, ensombrece: todo eso es violencia epistémica.
¿Cuál pregunta es válida; cuál no? ¿La pregunta está asociada al que la realiza o tiene una existencia colectiva previa? ¿Hay algo así como un magma precomún del que emerge la interrogación? ¿Qué poderes pone en riesgo? ¿Qué saberes? ¿Qué sujeciones? ¿Cuáles son los riesgos de cuestionar? ¿Por qué y para quién? Son cuestiones a dilucidar. Nosotrxs no queremos participar voluntariamente en ninguna forma de la violencia epistémica, al contrario, consideramos que las dudas son brotes atópicos que permiten avanzar, explorar otros terrenos, fugarse de los lugares comunes y las políticas inveteradas. Las preguntas son oportunidades para la creación y la imaginación.
Por eso nos ha sorprendido tanto encontrar preguntas inesperadas en algunos foros sobre la nueva reforma educativa a los que hemos asistido en las últimas semanas, donde algunas centenas de profesoras y profesores hacen cuestionamientos inéditos, para los que con honestidad, no tenemos respuestas estructuradas, pero no por eso queremos ni olvidar, ni menospreciar; es decir, no queremos someterlos a la violencia epistémica.
Por eso transcribimos aquí algunas de esas preguntas, unas cuantas intervenciones solamente, con la intención de alimentarán nuestras reflexiones en los tiempos por venir [1]. A quienes se atrevieron a hacerlas: ¡muchas gracias!
- En Michoacán se han realizado más foros en otras regiones para leer la “carta de AMLO”, pero no hay foros para ver, como aquí, en qué consiste la actual reforma. ¿Cree usted que eso nos ayude para incidir en la elaboración de las leyes secundarias? No tendrá otro objetivos?
- Queda claro que AMLO no podría solo hacer cambios profundos, siguen ahí los poderes fácticos, ¿cómo incidir como magisterio para impulsar cambios más profundos?
- ¿Qué hacer para lograr una verdadera reforma educativa?
- ¿Usted cree que la CNTE realmente impulsa la resistencia magisterial; o en ciertos momentos fungió como contención y límite a la movilización?, o sea, ¿fue gestionada por el sistema?
- ¿Por qué no salimos ganando todo con la nueva reforma? ¿Por falta de voluntad de AMLO o no tiene todas las condiciones?
- ¿Qué tiene que suceder para seguir fortaleciendo la organización magisterial en el estado y en el país y realmente incidir en las leyes secundarias?
- ¿Qué es lo que ha negociado la CNTE en las reuniones con AMLO? ¡¡¡Después de estas reuniones la comisión de la Coordinadora sale contenta!!!
Contacto: [email protected]
[1] Transcribimos literalmente, con la sintaxis y la puntuación originales.