Por: Cándido Josué Flores Contrera. 10 CUENTOS DE TECNOLOGÍA[1] Articulación por la Educación Pública. Línea de trabajo: Tecnología Disputa entre el Mercado y el Derecho a la Educación. 11/07/2020
CUENTO 1: MARTÍN UNA GUERRA ENTRE LA COMIDA Y LA TECNOLOGÍA.
Había un vez, en una comunidad no muy lejana, vivía Martín, un niño aproximadamente de 12 años, con un espirito inquebrantable, todas las tardes, a esas horas donde el sol parece abrazarse con la tierra, se sentaba Martín a contemplar ese bello fenómeno de la naturaleza, ese día lo observe, notaba en sus ojos, al ver ese maravilloso acontecimiento sueños de libertad, aunque se podía notar su cansancio por un día muy difícil, me senté junto con él en un roca a dialogar y hoy les cuesto lo que escuche.
Martín es un niño de Honduras, vive con su madre Carmen, su padre Chano como lo conocían en el pueblo, salió un día a las 2 de la madrugada, con un beso se despidió de su amada y con otro se despidió de sus hijos, esa fue la última vez que Martín vio a su padre. Con las Ilusiones de darles una vida digna, busco el sueño americano y sin un peso en la bolsa inicio la travesía…Pero sus sueños fueros cortados por la bestia; me dijo Martín: “alguna vez la quisiera ver” seguro se refería al TREN, con su voz toda cortada y sus ojos que reclamaban justicia … “De la Bestia, empujaron a mi papá no logramos traer el cuerpo, pero el sigue en mi corazón”
“Desde ese entonces Mamá Carmen se quedó sola, ella lava y plancha ajeno para darnos de comer, yo le ayudo, todas las mañanas salgo a trabajar en la milpa de Don Juan luego me voy para el parque y lustro zapatos, todas las mañanas escucho a mi mamá en su hamaca llorando y pidiéndole a Dios por nosotros. Mis dos hermanos piden comida y sé que mi mamá no encuentra que hacer… Pero mi papá siempre me decía estudia Martin estudia, se alguien en la vida, desde que el no está con nosotros yo me prometí que estudiaría.”
Martín me dijo, que después de ir a la milpa, salía corriendo para ir a la escuela, le pregunte por qué; la respuesta me sorprendió, tardaba una hora de su comunidad a la escuela. Su mama le había conseguido un uniforme usado tenía más parches que un neumático de bicicleta eso me dijo el, eso no le importaba lo que quería era estudiar cómo se lo prometió a su papá.
Martin está en sexto grado, en una escuela del municipio, los profesores quieren mucho a Martin ellos le asignan trabajos (barrer, trapear) para que pueda ganar unos pesos y siempre lo motivan. A pesar de las circunstancias es presidente de la escuela. Le pregunte a Martín: ¿cómo están haciendo en estos momentos en la escuela con la pandemia?
Me contesto algo muy difícil de escribir… La escuela cerro en marzo por la pandemia desde ese entonces Martín no a vuelto a recibir clases presenciales, les dijeron quédense en casa, pero Martin y su mamá no pueden, porque si no consiguen que comer no podrán sobrevivir. Todos los días escuchan al gobierno por un radio de baterías vieja que les regalo su tío juan, que repartirán raciones de comida; a los primeros días Martin se alegró mucho, luego pasaron los días y las semanas, la comida nunca llego, el profesor de la escuela les envía tareas a Martin por WhatsApp él me dijo:
“Para mí y mis compañeros es muy difícil, donde vivo no tenemos energía eléctrica , bueno no tenemos para comer menos para comprar un teléfono que tienen todas esas cosas, para hacer las tareas voy a donde don Lacho un señor que vive a media hora de mi casa, el me alquila el teléfono celular por 10 pesos la media hora yo le di el numero al profesor para que me escribiera a las 6 de la tarde yo trato de estar antes porque cuando Don Lacho se enoja no me presta el celular y me da un casquín (golpe) además si pierdo mi turno ya no me lo presta porque dicen que molesto mucho, unos días no voy porque no logro conseguir dinero para pagar los 10 lempiras, ayer vendí una leña que recogí y doña Juana me dio 20 lempiras, esas buruscas no costaban eso, pero ella me digo que sí, seguro quería ayudarme, con eso logre pagar 10 pesos de la alquiler del celular y de regreso compre unas tortillas para cenar, con mi mama y mis hermanos…”
Todos los días me siento aquí deseando que todo acabe, si me costaba ir a la escuela porque no tenía los libros ahora es más difícil; el profesor siempre me ha dicho que el año no lo vamos a perder…
Esto que comenta Martin me puso a pensar que todos hablan; de que la Tecnología posibilita la educación en estos tiempos de pandemia, dando por sentado que la tecnología está al alcancé de todos, en países como Honduras con grandes inequidades y desigualdades no solo en lo tecnológico sino en el derecho a la comida, a la vida digna, es muy difícil para los niños acceder a estos recursos con dignidad. Es necesario humanizar las herramientas tecnológicas y no pensar solo en lo económico, los gobiernos ser más humanos y pensar en las grandes mayorías que están sufriendo en las comunidades, solo visibles en campañas electorales.
Martin se levantó después de la puesta del sol y me dijo mañana será un día mejor y se retiró con una sonrisa, cuando se alejaba grito y me dijo papa siempre está a mi lado por eso a pesar de estar triste, sé que él cuida de mí. Espero algún día volver a ver a Martin esa pausa que realice en mi caminar por la vida fue de mucho aprendizaje, seguro no solo un Martín hay en Honduras que está enfrentando esta situación de pobreza, desigualdades e inequidades, solo unimos los que sufrimos saldremos adelante y por fin tendremos la oportunidad de construir un país digno. A Martín le gusto conversar. ¡A mí me gusto tener la oportunidad de volver a ver a mi hijo…!
FIN
Una historia que no supera la realidad
[1] 10 Cuentos de Tecnología, es una estrategia que busca concientizar sobre las grandes desigualdades e inequidades que existe para acceder a estos recursos. Buscan de una manera simple provocar el debate y buscar alternativas que contribuyan a impulsar una educación integral en tiempos de pandemia.