Top Posts
«La Jornada: Perú, movimiento popular destituyente» por Luis...
Debate sobre la moneda común o única para...
Día Internacional de la Educación
Monte Albán: una receta antigua para el éxito...
«La CELAC es una obra de todos»: Discurso...
El giro de Boric en relación a Venezuela:...
“El sistema llegó a su fin en Perú....
Gahela Tseneg Cari Contreras ¿Cuántos muertos vamos a...
Del Gran Rechazo a la Gran Dimisión
Aprenden primero a disparar y después a leer
  • Colectivo Insurgencia Magisterial
Insurgencia Magisterial
Banner
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Micropolíticas del vivir
Espacio principalEspacio secundario

Las Rastreadoras, en busca de seres amados para sepultarlos

por La Redacción septiembre 22, 2016
septiembre 22, 2016

Por: Javier Valdez Cárdenas. La Jornada. 22/09/2016

Culiacán, Sin.

Mirna Nereida no puede pronunciar la frase descanse en paz. Para ella, como para el resto de las personas que tienen familiares desaparecidos, ese descanso y esa paz, alusivos a los muertos que yacen en el cementerio, es como perseguir el horizonte sabiendo que éste siempre se aleja: la frase pacificadora y generadora de certidumbre está clausurada en su pecho, cancelada en sus labios y su corazón.

A Mirna Nereida Medina Quiñónez le desaparecieron a su hijo Roberto Corrales hace alrededor de dos años, en la comunidad de Mochicahui, municipio de El Fuerte. Y como la policía no lo buscó a pesar de que interpuso denuncia, ella empezó por su cuenta y luego, con otros ciudadanos que tienen parientes desaparecidos, recorrió montes y escarbó en riberas.

En el andar de este grupo por páramos y caminos desalmados se formó Las Rastreadoras, una organización civil integrada mayoritariamente por mujeres. Este mes cumplieron dos años buscando fosas y cadáveres en los municipios de Choix, El Fuerte y Ahome, y han logrado desenterrar los restos de 70.

Su labor ha rebasado a la que cualquier autoridad realiza en Sinaloa, donde suman cerca de 2 mil 200 desaparecidos en los cinco años y ocho meses del gobierno estatal encabezado por Mario López Valdez.

El 14 de septiembre pasado Las Rastreadoras localizaron una fosa cerca de la comunidad de Tosalibampo, municipio de Ahome, con nueve cadáveres de individuos que tenían no más de tres años de haber sido asesinados.

Las pugnas entre cárteles del narcotráfico, principalmente entre el de Sinaloa y células de los hermanos Beltrán Leyva –sobre todo en el norte de la entidad– han provocado aproximadamente 7 mil homicidios.

La policía de Ahome, según la fundadora de Las Rastreadoras, Mirna Nereida Medina Quiñónez, ha hecho el trabajo sucio y está implicada en muchas de estas privaciones ilegales de la libertad conocidas comolevantones.

Te seguiré buscando

Mientras no te entierre, te seguiré buscando, es la frase impresa en la parte de atrás de las camisetas que usan estas mujeres que recorren caminos de polvareda fácil y alebrestada, donde hay mezquites y cactos, veredas secas y recovecos propicios para la nada.

Una llamada anónima o un mensaje de texto desde un teléfono desconocido bastan para que estas mujeres acudan a lugares donde nadie habita, excepto la muerte: tumbas clandestinas, fosas con carne descompuesta y huesos pelones, prendas con sangre cual costra, dientes que alguna vez dibujaron sonrisas, cabello como estropajo.

Te buscaré hasta encontrarte, dicen las alrededor de 200 integrantes de Las Rastreadoras en redes sociales, así como en mantas y pancartas durante sus protestas.

Con las rodillas en el lodo, las uñas quebradas y terregosas, los dedos hundidos en la maleza, buscan y buscan, y encuentran, pero no los cadáveres de Roberto ni de muchos otros desaparecidos.

Sangre en los uniformes

Según Mirna Nereida, los policías están involucrados en cerca de 90 por ciento de las desapariciones y, dice, no hay autoridad que ponga freno a este ilícito.

Sólo tres agentes están presos y fueron condenados a 28 años y nueve meses de prisión por su responsabilidad en la desaparición forzada de un joven en la comunidad de Mochicahui, municipio de El Fuerte.

Los ex policías municipales Jorge Cota Jiménez, Óscar Guadalupe Huicho Puente y Jorge Martínez Santos, recluidos por orden del juzgado segundo penal, fueron los primeros servidores públicos condenados por desaparición de personas.

Los sentenciados participaron en la persecución de un vecino de la comunidad La Constancia –cuya identidad se mantiene bajo reserva–, el 17 de noviembre de 2013. Después de que lo detuvieron jamás se volvió a saber de él.

Sinaloa ha convivido durante casi un siglo con el narcotráfico. En medio de hombres armados, el trato inevitable con los delincuentes y un gobierno presuntamente coludido, Las Rastreadoras hurgan sin descanso.

En algunas ocasiones son guiadas por desconocidos que saben cuál fue el destino de los ausentes. Así ocurrió con Sandra Luz Hernández, quien buscaba a su hijo Édgar, un joven que trabajaba en la Procuraduría General de Justicia del Estado y fue desaparecido en 2012, luego de ser emboscado por pistoleros en Culiacán.

Ella vendía cosméticos y recorría barrios, casa por casa. Luego de ofrecer sus productos, mostraba la foto de su hijo y preguntaba si lo habían visto. En más de una ocasión acudió con desconocidos que ofrecieron darle pistas. El 12 de mayo de 2014 la citaron en la colonia Benito Juárez, a donde acudió sólo para que la asesinaran de 10 balazos en la cabeza.

El homicida, identificado como Jesús Fernando Valenzuela, fue absuelto y liberado en marzo de 2015. Sandra Luz lo señaló una y otra vez como el responsable de la desaparición de su hijo.

Lo sostuvo en audiencias con el gobernador, con el procurador Marco Antonio Higuera Gómez y otros servidores públicos. Pero nadie investigó. Ahora ella está muerta, su hijo sigue desaparecido, y quien la asesinó a balazos, libre.

Te buscaré hasta encontrarte, dicen las camisetas que portan Las Rastreadoras cuando acuden a búsquedas o realizan alguna protesta. Pero no. Aun encontrado el cadáver del ser querido, perforado y entelerido, no hay descanso. Hay muchos, cientos, miles, que esperan ser encontrados y también justicia.

Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2016/09/19/estados/030n1est
Fotografía: adiariooax

 

58
Compartir 0 FacebookTwitterWhatsapp
La Redacción

noticia anterior
Unicef: “España no ha entendido que un niño primero es un niño y luego un inmigrante o refugiado”
noticia siguiente
Inés Dussel. «La escuela debería ser el espacio de lo difícil pero importante». Argentina

También le podría interesar

Las nuevas formas de desaparición de personas: un...

diciembre 25, 2022

México. Educación para la paz ante la desaparición...

diciembre 19, 2022

México. Educación para la paz ante la desaparición...

diciembre 19, 2022

Visitantes en estos momentos:

130 Usuarios En linea
Usuarios: 10 Invitados, 120 Bots

Evento gratuito

Amador Fernández Savater en AUDIO

cba24n.com.ar · Después del Fin | por Amador Fernández Savater y Agustina Beltrán Peirotti

Artículos publicados por FECHA

enero 2023
L M X J V S D
 1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031  
« Dic    

Artículos por AUTORES

Fundación de los comunes

Fundacion de los Comunes · EL FUTURO NO ESTÁ ESCRITO. Organizarse en la crisis del capitaloceno

Traficantes de sueños

Traficantesdesueños · El Consenso de Wall Street. Rutas y ruinas del capitalismo verde.

Artículos más leídos esta semana

  • 1

    Genaro García Luna y Carlos Salinas de Gortari.

    diciembre 16, 2019
  • 2

    La necesaria solidaridad intergeneracional

    enero 26, 2023
  • 3

    La Batalla por la Tierra: Cómo las teorías de la conspiración solo sirven a un amo

    enero 27, 2023
  • ¿Cuáles son los elementos de una historieta?

    febrero 15, 2017
  • 5

    Liliana Ponce: “Cualquier poema impreso se manifiesta como audiovisual”

    enero 27, 2023
  • 6

    La destrucción del tejido social y la cultura de la guerra

    enero 26, 2023
  • 7

    Aprenden primero a disparar y después a leer

    enero 27, 2023
  • 8

    Bolivia, de la mano con industria china, industrializa el litio

    enero 27, 2023
  • 9

    Perú: Cuando Garabombo se hace visible

    enero 26, 2023
  • 10

    El renovado formato de la vieja derecha latinoamericana

    enero 26, 2023
  • 11

    Nació la Celac Social con el protagonismo de organizaciones de la región

    enero 26, 2023
  • 12

    Me caí del mundo y no sé cómo se entra – Eduardo Galeano.

    septiembre 26, 2018
  • 13

    «La CELAC es una obra de todos»: Discurso del Presidente Díaz-Canel en la VII Cumbre en Argentina

    enero 28, 2023
  • 14

    Migrantes: Ni víctimas, ni delincuentes. Trabajadorxs

    enero 27, 2023

Rolando Revagliatti. Argentina

Vanesa Monserrat. Argentina

Juan Antonio Guerrero O. México

Raúl Allain. Perú

Carolina Vásquez Araya

Ilka Oliva-Corado

Columna: CORTOCIRCUITOS

Javier Tolcachier

Manuel I. Cabezas González

Luis Armando González

Jorge Salazar

Adolfo del Ángel Rodríguez

Oswualdo Antonio G.

Iliana Lo Priore

José Eduardo Celis

Daniel Suárez

Güris J. Fry

Jorge Díaz Piña

Ángel Santiago Villalobos

Andrés Brenner

Alejandra Cortina

José Carlos Buenaventura

Luis Palacios

BIBLIOTECA de ÁBACOenRed

Suscríbete

Acepta recibir notificaciones

@2020 - Insurgencia Magisterial

Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Micropolíticas del vivir
Insurgencia Magisterial
  • Inicio
  • Nosotros/Legal
  • Directorio
  • Alianzas
  • Columnistas
  • Voces que seguimos
  • Micropolíticas del vivir
@2020 - Insurgencia Magisterial

Leer también:x

El sismo de nuestra lucha por nuestros...

octubre 5, 2017

“Ellos tienen el poder”

septiembre 7, 2017

12 mil victimas de desaparición forzada en...

febrero 23, 2016