Por: Luvis Hochimín Pareja. 19/11/2022
La cancillería uruguaya decidió pedirle al gobierno de Venezuela, que encabeza Nicolás Maduro, que acepte la designación como embajador en ese país de Eber Da Rosa. Es el mismo Maduro a quien Luis Lacalle Pou decidió no invitar a su asunción como presidente y calificó en aquel momento de dictador.
Da Rosa fue senador e intendente del departamento de Tacuarembó, y es dirigente del Partido Nacional (del presidente Lacalle), integrante de la coalición multicolor de derecha que gobierna el país, cuyos integrantes muestran diferentes reacciones: mientras al Partido Colorado le “inquieta” que el gobierno quiera tener un embajador en Venezuela, Cabildo Abierto no tiene “ninguna objeción” y sería “una muestra de realismo político”
Uruguay quiere tener embajador en Caracas y ello marca hoy un eslabón en la cadena de fracasos con la que Estados Unidos impulsó en la región el aislamiento de Venezuela, señaló Daniel Caggiani, del Frente Amplio, que integra la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado. “Sin duda es un cambio de posición de la coalición gobernante con respecto a Venezuela”, añadió
“Es un cambio de actitud, pero parece que son los vientos nuevos que soplan en el continente y capaz que Uruguay está acoplándose a esos vientos nuevos que soplan. Para nosotros, siempre es importante mantener los mayores niveles de relacionamientos diplomáticos y comerciales con los principales países de la región porque son nuestros vecinos y socios comerciales”, añadió el senador izquierdista.
El Senador del Partido Nacional, Sebastián da Silva, dijo que el nombramiento busca “ampliar mercados”, y que no obedece motivos ideológicos, ya que es algo “normal” que Uruguay mantenga relaciones diplomáticas con “todo tipo de regímenes”, y que estas “van por un camino distinto a la opinión que se tenga sobre el régimen de turno”.
“La verdad es que me llama poderosamente la atención porque durante los últimos cinco años siempre dijeron que Venezuela era una dictadura, que Maduro era un dictador, que no deberíamos tener representación diplomática como teníamos (en realidad era un encargado de negocios), que teníamos que hacer lo mismo que hacían los países del Grupo de Lima (que todos sacaron sus embajadores y representantes)”, dijo Rodolfo Nin Novoa, ex canciller.
“Me llama poderosamente la atención este viraje, esta vuelta de carnero, que da la diplomacia uruguaya respecto a Venezuela. Es la misma que dio [Emmanuel] Macron y la que dio [Joe] Biden, porque se ve que ahora el problema de la energía en el mundo hace que lo miren con otros ojos y las críticas ya no abundan”, analizó.
La embajada uruguaya en la capital venezolana está encabezada desde 2015 por un encargado de Negocios (Carlos Bentancour). Por el contrario, el embajador de Venezuela en Montevideo, Julio Chirino lleva 12 años en la plaza.
La noticia causó expresiones de preocupación por parte de dirigentes de la derecha, en especial del Partido Colorado, que quizá –como recuerda el matutino Ladiria- haya olvidado que el actual secretario general, Julio María Sanguinetti, restableció en su primera presidencia las relaciones diplomáticas con Cuba, rotas por Uruguay en 1964, y en su segunda presidencia invitó a Fidel Castro a visitar Uruguay.
De todos modos, la relación bilateral entre Uruguay y Venezuela no se había mantenido en términos armoniosos durante los períodos de gobierno frenteamplista. Desde 2015 no hay embajador uruguayo en Caracas y la representación ha estado a cargo de sucesivos encargados de negocios. En 2017 Maduro acusó al entonces vicepresidente, Rodolfo Nin Novoa, de coordinar acciones contra Venezuela con el gobierno de Estados Unidos.
LEER EL ARTÍCULO ORIGINAL PULSANDO AQUÍ
Fotografía: Question digital