Por: #NoVivimosDelAplauso. 26/11/2024.
A continuación, reproducimos el pronunciamiento del colectivo #NoVivimosDelAplauso, mismo que fue leído el día de ayer en la conferencia de prensa a la que convocaron diversas colectividades de cultura, donde se manifestaron en contra del recorte a Cultura anunciado en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2025.
México, a 25 de noviembre de 2024
Desde el movimiento nacional de trabajadoras y trabajadores del arte y la cultura #NoVivimosDelAplauso, queremos resaltar los siguientes puntos.
1. Con el recorte a la Cultura del 30% se evidencia una contradicción entre los 100 puntos de acción planteados por la presidente Claudia Sheinbaum y la pretensión de generar una Cultura de Paz y una República de Lectores.
2. Como parte del discurso del gobierno federal y local sobre el fortalecimiento de los derechos laborales de trabajadores/as del sector Cultura, denunciamos una “simulación” pues además de que persiste la terciarización (que desconoce la antigüedad, la trayectoria de los elencos artísticos por decir lo menos); precariza los salarios y fortalece la vieja ingeniería administrativa que consiste en primero trabajar, meses después firmar contrato y mucho después recibir el pago por el trabajo realizado.
Por otro lado: hemos detectado un aumento exponencial en basar las políticas de manifestaciones culturales y fomento a la lectura sobre el trabajo voluntario. Una verdadera política cultural no puede basarse únicamente sobre el trabajo voluntario que no se rige con contratos ni tiene filtros de profesionalidad (con eso no desmerecemos la pasión y la entrega de muchos de los que lo realizan).
3. Hay un enorme caudal de talentos profesionales en todas las ramas artísticas, jóvenes que están saliendo de las escuelas al mundo del trabajo muy preparados, artistas de todas las disciplinas que son reconocidos en la escena mundial y este recorte con la desaparición de programas que conlleva, los relega al desempleo y priva a la población de manifestaciones artísticas de calidad.
4. La Cultura produce el 7% del PIB (como lo exponía el maestro Rascón Banda) y la Unesco recomienda que se invierta en ella por lo menos el 1%. Este representa un derecho humano fundamental.
Hay evidencias por parte de sindicatos del INAH y del INBAL sobre el abandono y descuido de unidades regionales que carecen de infraestructura, papelería o de personal de limpieza; además de registrar problemas para el pago puntual del salario de docentes. El abandono de las escuelas de artes del INBAL; así como en el Conservatorio de Música y en la Dirección Nacional de Culturas Populares e Indígenas. No puede existir el doble discurso de que se fortalecerán las instituciones culturales que resguardan y producen patrimonio tangible e intangible; así como a los artesanos, parte de nuestra cultura viva, y que se fortalecerá la educación artística cuando hay precariedad laboral; cuando carecemos de políticas públicas culturales a favor de la producción artística; real defensa y difusión del patrimonio cultural; ejercicio pleno de los derechos culturales por parte de la sociedad. El recorte presupuestal al sector Cultura golpearía aún más a las instituciones, a lxs trabajadores formales e independientes.
Como parte del discurso del gobierno federal y local sobre el fortalecimiento de los derechos laborales de trabajadores/as del sector Cultura, es evidente que se prosigue con una “simulación”; además de que persiste la terciarización; el desconocimiento de la antigüedad; se invisibiliza la trayectoria de los elencos artísticos, por decir lo menos; se precarizan los salarios y no se cambia la vieja ingeniería administrativa donde primero se trabaja, después de meses se firman contratos y mucho después recibimos el pago por el trabajo realizado.
Hay un grave deterioro de la infraestructura cultural que no se resuelve con análisis de riesgos desde los escritorios, con tomas de decisión sin tomar en cuenta las necesidades de las comunidades y la mejora de las condiciones de los trabajadores de cultura que están en la operación de sitios arqueológicos, bibliotecas, escuelas de artes, museos, teatros, etc.
5. Por último, consideramos que el recorte al presupuesto de Cultura, debe cuestionar el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación. Elaborando la crítica a la orientación de gasto público, se visibiliza que es posible asignar más recursos al Ramo 48, Cultura.
Por un lado, se pretenden asignar más de un millón de millones a la Deuda Pública, es gasto comprometido con el FOBAPROA, una deuda privada que los gobiernos del PRI le cargaron a la sociedad; y la ilegítima deuda externa, entre otros pagos improductivos, que van a parar a manos de acreedores parasitarios extranjeros y nacionales. Por otro lado, se pretende destinar una cantidad importante para la Defensa Nacional, 152 mil millones de pesos en términos redondos, que es mucho más de lo que se piensa destinar a Salud o Cultura. ¿Qué tipo de socialidad está procurando el Estado mexicano sí una buena parte del erario público se destina a la militarización del país y el pago de deudas cuestionables? Recursos hay, pero ¿a dónde se destinan?