Por: Roberto González Villarreal, Lucía Rivera Ferreiro, Marcelino Guerra Mendoza. 07/11/2019
Después del Día de Muertos, es tiempo de hacer un balance de las luchas de lxs académicxs de la UPN desde el segundo trimestre de este año. Es necesario porque los resultados de las estrategias seguidas hasta la fecha ya están a la vista. Más aún, porque desde el 1 de octubre, con el primer paro de actividades, existe lo que podría denominarse un cambio de timón, que es necesario valorar porque se pretende articular con un Congreso de transformación y con las tácticas de un grupo de interés cada vez mas orientado al lado charril que carcome y medra con las unidades UPN de todo el país.
Comentaremos por apartados y bloques, pues la situación se complica y enrarece cada vez mas.
RUPTURAS
- Contra lo que podría pensarse, la situación actual no deriva solamente del incumplimiento en el pago del estímulo al desempeño docente de 2019. Viene de antes. En particular, de las acciones de lo que en un documento del año pasado llamamos un grupo de interés que nunca ocultó sus intenciones de convertirse en un grupo de poder: los refundadores, articulado por directivos de unidades, directivos de Ajusco, charros embozados y algunos trabajadores por cuenta, ambición o resentimiento propio. Todo se vale. La ambición del grupo lo llevó a reunirse con candidatos a la presidencia, Esteban Moctezuma, diputados, asesores y demás. Se manifestaron como representantes de trabajadores de la UPN de todo el país, ignorando cuestiones elementales, como aquella que jurídica, administrativa, laboral y presupuestalmente, la UPN solo son las unidades de la Ciudad de México, las demás tienen una relación académica, no laboral, ni administrativa; se reunieron en varios estados, elaboraron un proyecto que conocimos a última hora, estaban tan entusiasmados que se repartían puestos – incluida la rectoría, a la que candidateaban a un directivo del norte-; declaraban sin ambages que la universidad regresaría al sindicato (SNTE) y barbaridad y media más. Nosotrxs señalamos en su oportunidad que ese grupo NO NOS REPRESENTABA y lo seguimos diciendo.
- La ambición de tomar rectoría y demás cosas no fue atendida por la SEP; Esteban mandó de rectora a una académica de confianza de un subsecretario – dicen que de Gilberto Guevara Niebla, pero es muy difícil de comprobarlo, pues en la UPN sigue el tapadismo-. Por si fuera poco, en la Ciudad de México los refundadores perdieron el consejo académico. Vale recordarlo, porque todo se va a ir articulando poco a poco.
- El subsecretario comunista de educación superior, Luciano Concheiro, vino a presentar a la rectora y a prometer una democracia radical en la transformación de la UPN. Semanas después, estaba comprometido en la narrativa de las corrupciones, los privilegios, la austeridad y demás acusaciones contra lxs académicxs de las universidades públicas. A nosotros nos toca directamente, y sin gran capacidad de respuesta, por el carácter desconcentrado de la universidad.
- En esas condiciones se interrumpe el pago del estímulo. Las explicaciones fueron las que venían dándose desde los años anteriores: presupuesto insuficiente, déficit crónico y creciente de la universidad. Sin embargo, en los dos años antes presionamos y logramos sacar adelante el pago. La novedad del 2019 es la retórica de la 4T: privilegios, corrupciones, austeridad, desestructuración del tejido académico. La Ley de Austeridad Republicana cerró mas aún el cerco presupuestal. Las autoridades y la Comisión Mixta del estímulo se embarcaron en una estrategia reduccionista y una problematización muy pobre. Compraron acríticamente el discurso de la corrupción y realizaron un diagnóstico -recientemente dado a conocer-, tan reducido, que no marca ni tendencias, ni causas, ni dinámica, ni razones de la inflación de las plazas y la utilización de becas como complemento salarial a mandos medios y administrativos en funciones académicas. Eso no es lo peor: seguimos sin conocer los montos, las tendencias, la dinámica, las razones y los modos de sufragar el archinombrado déficit presupuestal (por cierto, déficit no es lo mismo que deuda). Ah, y además, no se han fincado responsabilidades para quienes hayan cometido los presuntos actos indebidos en nóminas y malversación -si la hubiere- de fondos públicos.
- Sin análisis profesional de las plazas y el déficit, la estrategia de la Comisión Mixta es simple: reducir el número de becas para repartir más. De ahí que la misma Comisión cambiara sus funciones y atribuciones: del análisis de la situación de becas, a compulsora de nómina, revisora de expedientes y colaboradora de las autoridades en el despido -o cualquier forma eufemística que se quiera-, de compañeras y compañeros interinos, reducción de niveles y de sueldos, etc. Sin faltar, como es público, descalificaciones -hasta por el mismo secretario general de la delegación Sindical D-II- UP3-, falsos, intrigas y todas esas formas del acoso laboral que han terminado por desestructurar el ya raído tejido académico y crear un clima laboral francamente intolerable, desesperanzador y cada vez mas agreste, como se observa en todos lados, hasta en los tendederos.
- La estrategia colaboracionista de la Comisión Mixta, su conversión en Comité de Higiene Pública -junto con el Comité Sindical- le sirvió a las autoridades para precarizar y enrarecer el clima de trabajo. El resultado de esa estrategia está a la vista: en términos monetarios, pagaron una quincena más y otra que a la fecha no sabemos si se van a dar los presuntos “ahorros” presupuestales obtenidos; en términos laborales, pérdidas de empleo, (re) contrataciones a la baja, incertidumbre; en términos de clima institucional, desestructuraciones, odios, equipos de trabajo desarticulados; en términos éticos, exacerbación competitiva; en términos políticos, colaboracionismo con las autoridades en las estrategias austericidas y de precarización laboral.
- Con el paro del 1 de octubre, pareció haber un cambio de estrategia. Las técnicas administrativas de reducción del número de becas para aumentar el monto a repartir se revelaron insuficiente. Ni pagaron ni alcanzará a pagarse todo lo que se debe con los presuntos “ahorros”. El problema es otro, sin dejar de reconocer que las perversiones administrativas y demás deben ser castigadas – lo que es una obviedad que debemos recordársela a las autoridades actuales-. El problema es otro, es tiempo de reconocerlo y actuar en consecuencia. Lo decimos porque ya se anuncian nuevas andanadas de recortes a los trabajadores por parte de la misma Comisión. Es un problema eterno que sigue la lógica de la precarización y la persecución: presupuesto insuficiente, entonces a recortar posibles beneficiarios, ¿y quienes lo hacen? pues la misma Comisión, a su imagen y semejanza. Es un típico procedimiento del poder administrativo y de todas las venganzas posibles. Por esa vía solo se redunda en los problemas de competencia y demás que se han advertido una y otra vez, pero que la estrategia de las autoridades y la Comisión solo han exacerbado. ¡Y hay quienes pretenden seguir en la Comisión Mixta esa misma estrategia!, suponemos que hasta que los posibles y casi únicos beneficiarios del estímulo sean los que lo asignen. ¡A eso se dirigen con la estrategia de sacar a unos para tener más! Las razones de la presunta corrupción ya se acabaron: el dinero que sale de ahí es demasiado poco, no alcanza, con los tres millones que se obtuvieron solo alcanzaría para una quincena y un poquito mas.[1]
- El cambio de timón desde los Paros es cada vez mas confuso y se pierde cada vez mas en problemas de legitimación. El Comité Delegacional y algunos de la Comisión ya hasta piden sanciones administrativas a quienes no asistan o se plieguen a sus decisiones: el marchómetro, por ejemplo. Cuando una dirección acude a sanciones para enfrentar problemas de legitimidad solo revela sus mas ocultas ambiciones. Por cierto, son las mismas tácticas charriles, versión de los institucionales o de las resistencias que se parecen tanto al poder, que no pueden engañarnos ya.
- A la fecha, los cambios en las demandas son tantos, tan rápidos y tan abruptos que es difícil seguirle la pista a su actualización. El 1 de octubre se reconocían tres principales: Aumento de presupuesto, Pago total de estímulos sin impuestos y Destitución de la rectora.[2] Estas demandas fueron tan sorpresivas, que no han vuelto a aparecer dos de ellas. Actualmente son muchas más, pero ya no aparecen ni la rectora ni los impuestos; en algunas versiones hasta la ¡Continuidad de la Comisión al Estímulo aparece como demanda! Cuando eso ocurre, es un síntoma inequívoco de confusión y aislamiento de representantes y representadas.
Resumamos para evidenciar los problemas a los que hay que enfrentar:
- La estrategia colaboracionista con las autoridades ha propiciado el empobrecimiento absoluto de cerca del 50% de la planta docente, la desestructuración de cuerpos académicos, el desconocimiento de montos, tendencias, dinámicas y responsabilidades en el déficit institucional y en la inflación de plazas, así como el enrarecimiento en el clima laboral, en el bienestar en el trabajo y en las expectativas académicas.
- La estrategia de reducir los beneficiarios para redistribuir es insuficiente y sus efectos de precarización, impunidad y desestructuración ahí están, son visibles y sensibles; sería una IRRESPONSABILIDAD pretender seguir por esta vía en la convocatoria a l estímulo al desempeño docente del año que viene. ¿Qué Convocatoria cuando no hay presupuesto? ¿Qué pretenden la Comisión Mixta, la rectora y las autoridades universitarias, Luciano, Esteban y AMLO: ¿que nos destrocemos internamente, acabarnos o entregarle la UPN a los charros de una vez por todas?
- Seguir por la misma vía, reeditar en peores condiciones la estrategia seguida este año, lleva al fracaso seguro y a la destrucción de las relaciones académicas y el clima laboral en la UPN; algo que se reconocía desde antes, que es común a todos los programas de becas, ¡pero que la 4T vino a potenciar en lugar de eliminar!
- El asunto es que no podemos olvidar ni el momento en que se pide todo esto ni los trabajos de un grupo de interés que no ha ocultado alianza con el neocharrismo. Ya hemos escrito varios documentos sobre el tema, indicando que ese grupo NO NOS REPRESENTA, que significa una involución y que no se sostienen ni sus documentos ni menos aun sus estrategias.
- Pensamos que debemos distinguir y estar atentxs a cualquier estrategia que se sirva de los legítimos derechos al pago de estímulos y la creación de nuevas formas de recuperación del salario real perdido, para llevar agua al molino neocharril que cada vez mas acecha a la UPN en tiempos de la 4T. Para ponernos en contexto, recordemos nada mas como esos mismos han promovido una presunta votación nacional para quitarle al Consejo Académico (que perdieron en la Ciudad de México) la organización de un congreso a todas luces mal hecho, mal planteado y cada vez mas falso, para entregársela a los poderes caciquiles de las unidades.
- Todo eso sucede ahora, estemos clarxs, veamos cómo, cuándo, hasta dónde y con quién luchamos. Nostrxs sabemos distinguir muy bien los derechos y las luchas de lxs trabajadrxs de las ambiciones neocharriles. No permitiremos que se confundan.
- Dicen que a rio revuelto, ganancia de pescadores. La 4T parece ser ese rio revuelto, en el que hay tantos, con tantas agendas, que los mas arrojados, mas voluntariosos, mas organizados, mas todo, serán quienes ganen.
- En Educación cada vez queda mas claro que la agenda neoliberal de Esteban Moctezuma ha logrado eclipsar a otras -si es que las hubiere-. Hasta las resistencias se han sumado a ella, de un modo u otro; solo recordemos aquel grito infausto de la dirigencia de la CNTE en Palacio Nacional: “Ya cayó, ya cayó, la reforma ya cayó”
- En la UPN parece estar ocurriendo algo similar: un rio revuelto en el que los grupos de interés son capaces de todo para lograr sus nada ocultos intereses. Solo recordemos las formas de reestructuración que proponen: repartir un presupuesto universitario que solo existe en su imaginación y en sus deseos; votaciones para deslegitimar un Consejo Académico cada vez mas amenazado por algunos consejeros de unidades y hasta por coordinadores de Ajusco.
- En el rio revuelto, pueden ganar hasta los charros, y lograr lo que nunca pudieron en su historia: tomar Ajusco y desbaratar el carácter universitario de la UPN.
- Dijimos antes que la situación se complica cada vez más, porque el año que viene la austeridad seguirá, la precarización también, las autoridades muestran cada vez mas que ya no se trata de una curva de aprendizaje de gestión, sino de verdaderas dificultades de concepción institucional y estratégica, que Luciano Conchdeiro no tiene idea de que es ser comunista en estas condiciones y de que la 4T no puede ocultar su verdadero rostro: la legitimación del neoliberalismo educativo.
Dejaremos para otras colaboraciones lo que pensamos de cada uno de estos rubros, pero por lo pronto advertimos algunas salidas que es necesario potenciar y reflexionar mejor.
FUGAS, o como imaginar y actuar de otro modo
La primera tiene que ver con el detonante: el pago del estímulo. La destrategia seguida, ya lo dijios, es peligrosa. Sus efectos ya los describimos. Sus peligros también. Seguirle por ahí, como vimos, no da para mas, a menos de lo que se quiera efectivamente es destrozar el tejido académico de la UPN. El problema se encuentra en otro lado. Como la cuestión del déficit es mas oscura que nunca, después de la incapacidad de las autoridades para explicar de cuánto es, desde cuándo, a qué se debe y cómo se financia, cualquier estrategia para pagar estímulos pasa por un aumento presupuestal.
No es un asunto exclusivo de la UPN, todo el sistema educativo está igual. Es un asunto técnico y político, ojalá las autoridades cumplan su parte, nosotrxs debemos insistir en la fuerza política universitaria para incidir en las decisiones que tome el Congreso de la Unión sobre el tema.
Si alguien cree que es una cuestión de gestión, está equivocado, es un asunto de presión política y movilización generalizada contra el austericidio. Si así se concibe la demanda, no podríamos estar más de acuerdo.
En un comunicado del 2 de octubre aparece un nuevo concepto que no se ha explorado ni convertido en una demanda y una estrategia de articulación, quizá porque es demasiado radical para una comisión y unas autoridades que solo se han propuesto precarizar y administrar el empobrecimiento y la mediocridad: la eliminación de los estímulos y la creación de programas de recuperación del salario real perdido en los últimos 30 años. No es muy claro el asunto; pero si es algo nuevo, que algunos habían o habíamos señalado de diversas maneras, en documentos enviados a la SEP, en corrillos y pequeños textos, en declaraciones y demás, pero que no formaba parte de una exigencia o una discusión formal.
En estricto sentido, NO ESTÁ EN LAS DEMANDAS, al menos las que aparecen en documentos y mantas. ¿Seríamos la primera universidad que está dispuesta a eliminar los estímulos como remanentes del modelo neoliberal, a cambio de un programa de recuperación del salario real sobre bases no competitivas? ¿Se trata de algo así?
NOSOTRXS NO PODRÍAMOS ESTAR MAS DE ACUERDO, a condición de que se problematizara y se esclareciera la ruta y sus características; no vayamos a quitar algo ganado por algo nebuloso; no vayamos a jalonar a la baja los programas y otra vez volvernos colaboracionistas con los planes del austericidio, la precarización y la sobreexplotación del trabajo de unos pocos.[3]
[1] Decimos presunta porque en tanto no se investigue y castigue a los responsables no deja de ser solo una medida administrativa, sin efectos judiciales, que son los que acreditan una violación a la ley.
[2] En un comunicado firmado por la Asamblea Permanente de Academicxs, el Paro se explica de otro modo. Las razones son cuatro y la demanda de la destitución de la rectora no aparece. Pero esas tres fueron publicitadas y, más aún, enarboladas en mantas dentro de la UP y en el mitin en la SEP.
[3] Hay mucha literatura sobre el tema, sería bueno trabajarla de manera seria para evitar las consecuencias indeseadas de todos los esquemas de igualdad salarial, que luego se convierten en esquemas de desigualdad en cargas de trabajo, compromiso y productividad. No es tan simple, muchos años de neoliberalismo, de stajanovismo y de administración de la mediocridad debían ser reconocidos y problematizados. Ver lo que pasa en la UACM; si la nueva concepción se toma en serio y se trabaja académicamente, sería una buena contribución de la UPN.