Por: María Fernanda Triano Rivera (alumna del grupo A del 6º semestre de Educación Física de la BENV). 14 de junio de 2020
Como parte del desarrollo del curso de Gestión Escolar en el sexto semestre grupo “A” de la Licenciatura en Educación Física de la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen”; se realizó un debate con el fin de establecer posturas en favor y contra del papel del educador físico dentro de las instituciones en que se imparte educación; esto con el fin de fijar un panorama distinto al tradicional del papel que este actor desarrolla dentro de nuestras escuelas, así como los beneficios y/o prejuicios que acarrea consigo.
No es nueva la mención sobre que el educador físico no cumple con la difusión de hábitos saludables, aun teniendo en cuenta los altos indicies de obesidad en nuestro país ubicándolo en el primer lugar en obesidad infantil y el segundo en obesidad en adultos.
La Educación Física a lo largo de los años se ha visto minimizada debido a algunas acciones del educador físico, ya que, en determinado momento, se vio catalogado como el profesor menos capaz de aportar un beneficio a la institución y, por lo tanto, un actor no importante en cuanto a las decisiones en pro del desarrollo educativo de la escuela.
Se ha considerado que el educador físico forma parte de una institución, pero que toda la responsabilidad no recae en él, sino en los directivos, haciendo especial énfasis en el director o coordinador de la institución; además de que éste deberá ser el impulsor principal de las gestiones a realizar.
Sin embargo, se debe considerar que estas especulaciones se han visto modificadas gracias al trabajo efectivo de la mayoría de docentes en esta área; el educador físico no solo ha demostrado ser competente, sino que además tiene las competencias necesarias para fungir como un líder y ejemplo profesional, que puede tener iniciativa y participación y no solo ser un espectador.
El docente de educación física tiene las capacidades suficientes para generar proyectos de gestión en beneficio de la materia y de la institución educativa en general, estas capacidades podrían ser demostradas en el momento que se le de voz y voto al educador físico, como siempre debió haber sido.
Dentro de los puntos abordados en este debate se mencionaba de igual forma la participación en los consejos técnicos y cómo el educador físico se ha visto desplazado, esto como consecuencia de la falta de oportunidades y apertura a la comunicación de las problemáticas existentes en el área y, aunque no se debe dejar de lado que muchas veces existe un desinterés hacía la participación por parte del docente, ha de señalar puntualmente que esto ha sido un reflejo de las acciones de desplazar a la materia como una de “relleno”.
Para que una institución pueda prosperar en beneficio de la educación debe existir una comunicación conjunta, en la que se mencionen las distintas posturas y, a su vez, las necesidades de todos y cada uno de los actores, no solo de los estudiantes, sino también de los formadores de estos.
Cuando se tiene una comunicación y apertura, a todas las necesidades, el impulsar óptimamente a la institución será tarea colectiva y se verán beneficiadas todas las áreas de la misma.
Como en todas las disciplinas educativas, una de las principales herramientas para el logro de los objetivos y/o propósitos educativos es la planeación. En ella se ven marcadas las pautas a seguir para lograr los objetivos establecidos según las necesidades de los alumnos, con el fin principal de optimizar el rendimiento académico, cognitivo, social e incluso el potencial de liderazgo del alumno.
Estos objetivos podrán cumplirse si existe la triangulación de: alumno, padre y docente (profesor de aula, profesor de educación física, directivos, etc.) por lo cual, estos puntos a desarrollar deben ser considerados entre los actores de la institución para que los mismos puedan ser reforzados y utilizados de manera óptima por el docente y así transmitirlo ampliamente al alumno teniendo como resultado un aprendizaje significativo. A pesar de tener presente este concepto, en algunas ocasiones los profesores de aula pueden ser una limitante para el desarrollo del educador físico, ya que un extracto docente aun se ve enfrascado en la ideología de que la materia no es necesaria y/o minimizan su labor de crecimiento e importancia dentro de la escuela.
Como opinión personal, el educador físico debería ser considerado como uno de los actores primordiales en el proceso de enseñanza/aprendizaje del alumno debido a sus capacidades de transmisión de conocimientos por medio de actividades lúdicas, las cuales no solo aportan al alumno las herramientas para desarrollarse motrizmente, sino que también impulsa sus habilidades de comunicación, socialización, retención de aprendizaje, desarrollo cognitivo, trabajo en equipo, entre otras muchas cualidades.
El educador físico ha sido considerado como el profesor más querido por los niños, ya que la clase de EF representa un medio por el cual el alumno puede expresarse corporalmente sin una limitación, teniendo como resultado el reconocimiento de sus capacidades y alcances de movimiento, por medio de algo atractivo como lo es el juego.
Entre los temas abordados se mencionó una de las problemáticas que surgieron con la desaparición de la Dirección General de Educación Física en algunas partes, trayendo como resultado la pérdida de disciplina y compromiso por parte de los docentes de EF, sin embargo, se debe tener en cuenta que este no ha perdido su capacidad de autonomía y mucho menos su capacidad de tomar un papel en el rol educativo y de gestión en una institución tanto para el desarrollo personal como de su escuela, sin embargo, una minoría no toma consciencia de estas capacidades y evita responsabilidades, obteniendo como resultado lo que anteriormente se mencionaba: ser excluido de las cuestiones que generen un cambio en la institución.
El educador físico es un gestor de cambio, sin embargo, la implantación de este concepto debe crearse desde la formación docente, para que, de esta forma, al comenzar su rol dentro del servicio profesional tenga las características e iniciativa de integrarse a la plantilla docente de manera activa y en la cual se tenga en cuenta su participación y principalmente su opinión y postura sobre los aspectos que beneficien el desarrollo integral de la institución y principalmente de los educandos.
Muchas veces para ser considerados, en este caso profesionalmente, de debe tomar la batuta de la situacion y demostrar las capacidades y alcances que se pueden lograr personalmente y en conjunto y, aunque muchas veces no suele ser un trabajo fácil, es necesario para lograr obtener un reconocimiento laboral y una inclusión y no exclusión.
La labor de la Educación Física resulta algo controversial, ya que, a pesar de que lleva en el currículo mas de 50 años, aun no se le da un rol especifico. Para que este cambio pueda suscitarse, este debe empezar desde el educador físico, teniendo en cuenta su papel e importancia en la educación no solo de su institución sino de todo el país.
Aunque probablemente la educación física se vea afectada e incluso modificada por la problemática a la que nos enfrentamos con una nueva normalidad educativa frente al COVID-19, es aquí donde se ha de definir el rol del educador físico como un gestor de cambio, a través del cual puedan realizarse modificaciones en beneficio de la actividad física pero ahora por medio de la implementación a distancia. Nos enfrentamos a la utilización de medios electrónicos como la herramienta principal para el desarrollo y estimulación de las habilidades motrices del niño y principalmente la de no generar hábitos de sedentarismo durante su estancia en casa.
Se debe crear una “consciencia física” la cual nos ayude a entender la importancia de la actividad física, el ejercicio y el movimiento en general.
Nos enfrentamos a muchas situaciones buenas o perjudiciales hacía nuestra profesión, sin embargo, es nuestra responsabilidad ser agentes de cambio, para que podamos obtener beneficios y principalmente resultados no solo personales, sino en favor de la educación en general.
El educador físico tiene a su alcance muchas posibilidades, pero una de las principales es la de generar un cambio en aras de la educación en un sentido holístico, teniendo en cuenta el impacto que ha de generar, pero basado en las interrogantes de ¿qué tipo de educador físico quiero ser?¿qué quiero aportar? y ¿qué cambios quiero generar?.
Nota: la presente relatoría forma parte del debate de cierre de curso de la asignatura de Gestión Escolar, grupo “A” 6º semestre de la licenciatura en Educación Física de la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen”, efectuado el 12 de junio 2020 vía plataforma digital.
Fotografía: mundoentrenamiento.com