Por: José Yorg. 21/11/2024
“Las cooperativas no pueden ser neutrales en aspectos políticos, ya que representan generalmente aquella parte de la población que más sufre por el menor desarrollo del país y que por consiguiente tienen mayor interés en una política de cambios que en una política conservadora”. Dieter Benecke
“El advenimiento de la transformación conservadora neoliberal a nivel global tiene que ver con la etapa del actual capitalismo financiero. El gobierno argentino es fruto de esa corriente, es cierto, pero también y sobre todo por captar el voto bronca del pueblo-sea equivocado o no-porque la predisposición del peronismo evidenció retirada y abandono de sus propósitos históricos en cuanto a acrecentar las conquistas sociales y económicas”. J. Yorg.
¿Es que acaso el peronismo, como herramienta electoral de emancipación social, económica y política, está en severo entredicho actualmente? J. Yorg.
Hace tan sólo algunos días en que, periodísticamente, anuncié la fundación del Partido cooperativo de la Provincia de Buenos Aires. El impacto político que produjo este hecho, cabe señalarlo, fue sustantivo.
Ahora, cabe también interrogarnos: ¿Por qué surge el partido cooperativo argentino?
El diagnostico que realizaron y lo siguen haciendo muchos especialistas en la materia me liberan de ensayar otras teorías y argumentos sobre el porqué del voto popular al actual gobierno argentino constituyen, en gran medida el sustrato de las respuestas que dan el contexto: El agotamiento, el cansancio de promesas incumplidas, es decir, más de lo mismo. Pero lo peor de todo este panorama es que las parcialidades partidarias no aprendieron o no quieren aprender la lección y cambiar el discurso y generar acciones de rupturas con la vieja política y avanzar hacia nuevas fórmulas de emancipación.
Entiéndase, aquí en esta construcción no anida ninguna postura mesiánica, solo esfuerzo y realismo y dignidad. Más bien es correcto afirmar que son las circunstancias las que empujan a buscar y encontrar un tipo de organización que contenga los anhelos populares: ¡Un mundo mejor, un mundo cooperativo!
La desesperanza e incredulidad de gran parte del pueblo que imputan a los partidos políticos existentes son la marca de época, caracterizada por la corrupción, la corporación partidaria de los buenos negocios políticos-partidarios y el abandono de los ideales, son claros indicadores de la decadencia.
Esta misma situación de hartazgo fue un detonante muy significativo para animarse a pensar y articular una propuesta cooperativa política.
El enorme componente idealista, moral, transformador social y económico sustentado en valores y principios nobles más temprano que tarde debía estallar con su fuerza política contenida por un movimiento entregado al empresarismo, al economicismo, alejado de sus principios transformadores que legaron sus pensadores y pioneros.
Inglaterra.
Tampoco está ajeno la influencia que emana el Partido Cooperativo Británico (The Cooperative Party) que fue constituido en 1917, y desde 1927 concurre a las elecciones conjuntamente con el Partido Laborista, ahora en función gubernamental.
Recientemente la Canciller Rachel Reeves se comprometió a establecer un Consejo Empresarial Mutuo y Cooperativo para promover el crecimiento. Co-operatives UK, el máximo organismo sobre cooperativas en el Reino Unido, acogió con satisfacción el compromiso de fomentar la asociación y el crecimiento del sector.
Rose Marley, directora ejecutiva de Co-operatives UK, afirmó: “Los ministros de Hacienda anteriores han pasado por alto el poder de las cooperativas y las mutuales para impulsar un crecimiento justo y sostenible, pero ahora no. Rachel Reeves ha demostrado una intención clara y práctica de impulsar soluciones cooperativas para algunos de los mayores desafíos del Reino Unido.
“El reconocimiento por parte del Gobierno del papel fundamental que desempeñan las cooperativas y las mutuales en la construcción de una economía más justa y resiliente es sumamente positivo. Nos complace ver compromisos tangibles, en particular la formación de un Consejo Empresarial de Mutuas y Cooperativas”.
Argentina.
El verso, la mentira retroalimentada de que la crisis económica se superará a partir de bajar la inflación, y otros gastados argumentos ya no van más. ¡Basta!. En este punto Arturo Jauretche nos ilumina con precisión ““No se trata de cambiar de collar sino de dejar de ser perro”.
¿En verdad nos proponen que se les deje tranquilos administrar la pobreza y dar la bienvenida a la esclavitud moderna? ¡Están rechiflados!
Conviene desde ya anotar que esta fuerza política-cooperativa argentina, se sustenta y se nutre en gran medida en la capacidad que ha encontrado en las organizaciones de base y sus culturas de esfuerzos conjuntos, bases sociales preparadas para dar respuestas cooperativas a su propia constitución política.
Este armado político cooperativo posee en su composición organizacional una base profundamente popular, obrera y campesina, expulsados de sus terruños, obligados a buscar mejoría en empleos de calidad que en la práctica ya no existen, sin embargo, lograron ver en el sistema cooperativo un camino, una alternativa de otra economía, de otra forma de organizar la producción y compartir proporcionalmente los beneficios creados organizadamente bajo otra concepción del hombre, de la sociedad y la empresa. Sabedores de que la salida a la crisis de pobreza y marginación, es cooperativa.
Otra vertiente que se acerca a esta incipiente experiencia provienen de las denominadas “cooperativas tuteladas” o cooperativas municipales o planeras, como fuere, se acercan.
Claudia Korol, periodista argentina, educadora popular y feminista, conocedora en profundidad de esta base social a la que aludimos es autora, entre otros, de muchos libros y textos como “Dilemas del cooperativismo en la perspectiva de creación de poder popular” en que, de alguna forma encontramos anticipación o quizás una coincidencia, cuando afirma:
“La cooperación, como concepto y como valor, está en la base de nuestros pueblos originarios. Re-conocer esta experiencia como antecedente, nos permitirá pensar la potencialidad cultural acumulada por la misma en la conciencia social argentina. Posibilita también pensar en la diversidad de matices y experiencias que pueden enriquecer al movimiento cooperativo, sobre todo a la hora de pensar en una etapa refundacional del mismo, conectado íntimamente con los movimientos populares que hoy se multiplican en las zonas de exclusión”
Con mucho respeto nos permitimos agregar…“Sobre todo a la hora de pensar en una etapa refundacional política del mismo,
La cooperación en modo político.
El partido cooperativo viene a renovar y fortalecer viejas consignas no cumplidas como soberanía política, independencia económica y justicia social para la felicidad del pueblo argentino y en hermandad Latinoamericana.
¿Es posible alcanzar hoy esos objetivos estratégicos? Más vale que se logre en conjunción y en alianzas con otras fuerzas políticas y la creatividad y talento de intelectuales dispuestos a aportar inteligencia en acción cooperativa.
Este ensayo social y político cooperativo ha logrado despertar tempranamente ya emociones, interrogantes y expectativas, pero no indiferencia. La responsabilidad política cooperativa se encamina con alianzas y proyectos, en presencia territorial y fuerza de convicción que entusiasma a propios y extraños.
¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!
Fotografía: José Yorg