Nadie en su sano juicio ayuda voluntariamente a construir su patíbulo.
Jorge Salazar García.
Los medios han dado profusa cuenta del accidentado proceso para celebrar la consulta de revocación de mandato el próximo 10 de abril. Dentro y fuera de las instancias correspondientes (INE, los tres poderes) tanto los requisitos para su celebración como la elaboración de la pregunta, fueron objeto de pólemicos encuentros y negociaciones. Y aunque cada parte cedió lo que le ordenaron cediera, ninguna parece haber quedado satisfecha. ¡Vamos! hasta la Suprema Corte tuvo que intervenir ordenando dejar la pregunta tal como se imprimirá en la boleta. Sin embargo, en las cúpulas pareciera haber una tregua convenida. ¿Qué más se negoció?
Redacción de la pregunta.
En el proceso de elaboración de la pregunta se entrevió la sombra de un par de orejotas neoliberales entrometiéndose. La intromisión fue exitosa pues se impuso un texto extenso y ambiguo, incluso, para cierto sectores de la población que nunca leen nada, incomprensible. La pregunta tiene una complejidad intencionada y parece estar orientada a inicidir en el ánimo más que en la razón de la gente. Es probable que en su redacción hayan participado expertos del Instituto Nacional de Evaluación de la Educación de Peña Nieto, especializado en evaluar (joder) a los maestros. En sus manuales se describen las técnicas para elaborar toda clase de ítems y determinar con precisión lo que pretende medir, por ejemplo, un ítem de respuesta cerrada (como debiera ser el caso que nos ocupa).
Quizá el texto aprobado, al incluirse las dos posturas opuestas, fue el más conveniente. Esto determinó que en lugar de una fueran dos las preguntas y cada cual con su respuesta. La lectura política es: “Si eres de izquierda cruza la derecha y si eres de derecha, cruza la izquierda”. Sacrificaron claridad, técnica y formalidad. ¿A quién conviene tanta confusión? ¿No hubiera sido más sencillo cualquiera de los dos textos siguientes?
¿Estas de acuerdo en que a AMLO se le revoque el mandato por pérdida de confianza?
SI NO
¿Estas de acuerdo en que AMLO siga en la presidencia de la república hasta que termine su mandato?
SI NO
Refiriéndose a esta cuestión el folleto de la LX legislatura federal recomienda seguir parámetros internacionalmente reconocidos para formular las preguntas de manera precisa y sin sesgos. Algunos de esos parámetros son: a) La participación de expertos ciudadanos en su redacción, b) No incluir conceptos o palabras ajenas a las utilizadas por el ciudadano de a pie, c) Estar balanceado, d) Ser lo más neutro posible, e) Que la pregunta pueda ser contestada categóricamente en sentido positivo o negativo. ¿Cuántos de estos estándares cumple la pregunta plasmada en la boleta aprobada?
Fecha de la Consulta.
Ya en este terreno debe recordarse que en política TODO es fondo. Los actos y decisiones de quienes tienen PODER llevan o tienen siempre una intencionalidad, mensaje u orden; y, claro, destinatarios. EL mensaje puede ser una advertencia, amenaza, consideración o aviso. La elección de la fecha para llevarse a cabo la Consulta, parece haber sido aprovechado en ese sentido tanto por el Presidente como por el “jefe de la mafia del poder”.
AMLO, propuso inicialmente fuera el 21 marzo, aniversario del natalicio del héroe de la Reforma, Benito Juárez. Considerando al Benemérito, fuente del Estado laico (al separarlo de la Iglesia), e iniciador de la 2º transformación de México, hizo explícito que la 4T es una continuidad de aquella gesta LIBERAL al pretender separar el poder político del Económico. Como Salinas no es ningún tonto y goza de cabal IMPUNIDAD pudo ordenar a sus gnomos del INE cambiar dicha fecha por otra igual de significativa: el 10 de abril. Esta presunción se fortalece debido a que el “padre de la desigualdad social”, en su juventud, fue gran admirador de Emiliano Zapata, al grado de ponerle el nombre del General revolucionario a su primogénito (Emiliano Salinas). Lo intrigante de la elección es que ese día, pero de 1919, Zapata fue acribillado a traición por órdenes del presidente Venustiano Carranza. Hay otro detalle que relaciona al Caudillo del Sur con la PRESIDENCIA: cuando Zapata estuvo en la ciudad de México no quiso sentarse en la silla presidencial diciendo: “deberíamos quemarlo para acabar con las ambiciones”, expresión comparable con aquella de “mandar al diablo las instituciones” de AMLO. AMLO reviró el mensaje acusando a los conservadores de haber elegido la fecha porque, ese mismo día, pero del año 1864, Maximiliano de Habsburgo aceptó la corona como emperador de México.
Y en esas siguen, sin rasgarse la vestiduras. Los “buenos” pidiendo una consulta para revocar el mandato al presidente de los pobres y los “malos” ¿boicoteándola? ¿Quieren más confusión? Pasemos a los requisitos legales que podrían hacer vinculatorios los resultados.
Evidentemente un INE faccioso, viciando intencionalmente el proceso no puede garantizar la participación de todos los ciudadano ni mucho menos hacer inobjetables los resultados. La habilitación de sólo el 30 % de las casillas inhibirá la participación en los lugares donde no se instalen. Las cuentas indican lo siguiente: Si en el 2018 se obtuvieron 56 millones de votos en una elección presidencial con 60% de participación e instalándose 160 mil casillas; en esta ocasión, las 57 mil casillas autorizadas, esperando el mismo nivel de participación, podrían acudir 17 millones de participantes. Los cuales, aun votando todos en mismo sentido (lo cual es imposible) no harían vinculante el resultado que exige la participación del 40% del padrón (37 millones). Incluso ajustando proporcionalmente el porcentaje mencionado (40%), como debe ser, al nuevo universo (17 M), a la oposición, sin trampas y porquerías, les es imposible conseguir en una jornada los 6.8 millones requeridos para hacer vinculante el resultado. Su objetivo inmediato debe ser otro.
En las condiciones actuales, por lo tanto, no se puede REVOCAR el mandato a nadie con una consulta. Las leyes conservan candados que impiden al ciudadano quitarse de encima a tanto gañán abusivo que le miente, roba y traiciona. La 4T podría eliminarlos con una reforma política. Lamentablemente AMLO ya no cuenta con la mayoría del Congreso ni con un Partido sólidamente definido, para ello. A los políticos corruptos les aterroriza tan solo pensar que el pueblo pudiese tener la posibilidad real de correrlos. Nadie en su sano juicio ayuda voluntariamente a construir su patíbulo.
No obstante, estamos ante un escenario donde todos llevan “agua a su molino”. La derecha exhibirá los acarreos de la izquierda y la “ociosidad” del gasto para tan “POBRE” participación; la dirigencia de MORENA mantiene distraída y dividida a la base militante que ya comienza a revelarse (Convención Morenista); el presidente recibe aliento popular para impulsar sus reformas faltantes; el ciudadano, la satisfacción de cumplir con un deber cívico; y, por último, el INE de Salinas afina el control de la estructura operativa y de conteo para futuras batallas. Recuerde que posee copias fresquesitas de 11 millones de credenciales de elector y firmas originales de quienes solicitaron la Consulta. ¿Qué sigue? ¿Demandar al Presidente por no cumplir la veda electoral?
Al político honesto le convendría que la Consulta (referendum, plebiscito, iniciativa popular) se ciudadanizara, su permanencia en el poder sería prueba irrefutable de su LEGITIMIDAD. La gente DEBE decidir cuándo, cómo y por qué realizarla como sucede en Holanda por mencionar un país. Son importantes herramientas que utilizadas con base en procedimientos y estándares rigurosos, propician un círculo virtuoso entre gobernantes y gobernados.
Un abrazo de felicitación a Don Pablo Gonzáles Casanova por su 100 años de vida fructífera y solidaria.