Por: Biodiversidadla. 01/11/2024
Seis preguntas cruciales sobre la digitalización de la cadena alimentaria
La nueva investigación del Grupo ETC describe cómo la digitalización entra en la agricultura de todas las escalas, tanto en el norte como en el sur gloables. Viene disfrazada como una atractiva tecnología de avanzada, ¿un caballo de Troya? con flotas de drones, tractores inteligentes, aplicaciones y sensores de lujo. Pero en el vientre de la bestia se encuentra el enorme sector corporativo de la agroindustria, que ha unido fuerzas con los gigantes de las empresas de datos masivos (Big Data) para fortalecer su control sobre nuestros sistemas alimentarios.
“Caballos de Troya en los campos” se ofrece como un recurso a los movimientos sociales, con información y perspectivas que sirvan para cuestionar estos complejos desarrollos tecnológicos. Consideramos que la implementación de herramientas digitales en una amplia gama de sectores agrícolas y alimentarios puede ser profundamente perturbadora, y que muchos agricultores, agricultoras, comunidades campesinas y trabajadores de la alimentación sean afectados.
El informe enfatiza que la cuestión no es analizar los pros y los contras de las herramientas digitales individuales o el uso de plataformas de comunicació, o los dispositivos digitales que podrían utilizarse para hacer más eficaz la producción de alimentos, como sensores de temperatura o humedad, o rastreadores de ganado. La cuestión es el modelo de negocio extractivo en el que se están desplegando, así como la propiedad privada de las infraestructuras que lo hacen posible.
Este documento muestra que la agricultura digital tiene un alto precio. Los agricultores que se incorporan a la agricultura digital corporativa generalmente firman contratos con empresas, que les obligan a comprar semillas y productos agroquímicos a esa misma empresa, a seguir sus instrucciones (que se promueven como “consejos”) y a dar libre acceso a sus datos. A sabiendas o no, permiten una estrecha vigilancia de sus sistemas productivos, su territorio, su entorno y cada uno de sus movimientos.
Como resultado, los agricultores pierden autonomía y conocimientos. Se convierten en meros ejecutores de lo que indican las empresas de datos masivos y de tecnología “de punta”. Lo cual contradice totalmente la búsqueda y práctica de la soberanía alimentaria, que se basa en que campesinas, campesinos, cultivadores urbanos, trabajadores del procesamiento y la distribución, controlen la forma en que se producen, comercializan y consumen los alimentos.
Les invitamos a explorar otros materiales sobre este mismo tema:
– Los podcasts “ ¿Quién controla lo que comemos?” sobre los problemas que acarrea la digitalización de la alimentación y la agricultura y cómo están respondiendo los movimientos sociales.
La animación El Gran Hermano llega al campo: asalto digital a la alimentación ¡ahora en 12 idiomas! – Árabe, hindi, portugués, bisaya, filipino, bahasa indonesio, italiano, swahili, francés, español e inglés y japonés.
trojan_horses-esp-18sept(8,07 MB)
LEER EL ARTÍCULO ORIGINAL PULSANDO AQUÍ
Fotografía: Biodiversidadla