Por: Daniel Cortés Escamilla. Liberación México. 11/03/2016
Es evidente para todos los mexicanos el que la educación en nuestro país atraviesa por una etapa de crisis, propiciada en primer lugar por los organismos financieros internacionales que han impuesto un modelo educativo en el que se pretende no sólo privatizar la educación y ponerla al servicio de los grandes capitales nacionales y extranjeros como mano de obra barata, sino también pretenden liberalizar el trabajo docente y ponerlo al mismo nivel de las otras mercancías, por medio de la ley de la oferta y la demanda, comenzando por eliminar todo vestigio de los derechos laborales.
Sin embargo, tenemos que mencionar que en este proceso, las ambiciones de los dirigentes sindicales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), a todos los niveles, han jugado un papel de caballo de Troya, al realizar el trabajo sucio de manipulación de los trabajadores de la enseñanza al apoyar, en primera instancia, las reformas laborales impulsadas por los partidos de la derecha como son el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN), para eliminar los derechos laborales de todos los trabajadores, y posteriormente, al apoyar abiertamente la Reforma Educativa, que pretende dar el golpe final para desaparecer la educación pública.
A pesar de que algunos de sus líderes en el país, pero sobre todo en el estado de Hidalgo, se empeñan en decir que ellos no apoyaron dichas reformas, lo cierto es que tanto sus líderes nacionales, como la hoy recluida en su domicilio Elba Esther Gordillo, así como sus diputados del Partido Nueva Alianza (PANAL), firmaron y apoyaron dichas reformas, tal como ocurrió en el Congreso de la Unión, en la que sus diputados, para guardar las apariencias, “se abstuvieron” de votar en cuanto a las reformas laborales, es decir, callaron vergonzosamente y no se atrevieron a denunciar las pretensiones de quienes los han llenado de beneficios, cargos políticos y riquezas mal habidas, —no olvidemos que el que calla otorga—, y en la práctica dieron su respaldo a dichas iniciativas, para borrar de un plumazo las conquistas laborales logradas durante muchos años de lucha de la clase trabajadora en nuestro país; pero en cuanto a las leyes secundarias aprobadas por los partidos de la derecha, abiertamente las aprobaron los diputados del PANAL, a tal grado de que su líder, Juan Díaz De la Torre, las defendió públicamente, calificándolas de positivas y necesarias.
Pero más allá de esa actitud entreguista, para todos los trabajadores de la educación está claro que la corrupción de esos mismos líderes, es otro de los factores que le han dado argumentos a los enemigos de la educación pública, para lograr el consenso de la población poco o nada enterada del asunto en contra de los maestros; a tal grado, que todos sabemos de la impunidad con que actúan los docentes irresponsables, faltistas y poco comprometidos con su labor para escudarse y ser defendidos a capa y espada por esos mismos líderes que en sus discursos se llenan la boca al hablar de su compromiso con la educación.
Pero la cosa no para ahí, el caso es que también es conocido por todos los docentes, que aquél que no apoye al PANAL es excluido “de los beneficios” que otorga el SNTE, tales como los cambios de zona, las famosas computadoras para los maestros y, sobre todo, los nombramientos, ascensos y horas de fortalecimiento; a tal grado están las cosas en el SNTE —cuando menos en el estado de Hidalgo—, que han llegado a la aberración de levantar actas en las delegaciones sindicales para dejar por escrito que todos están obligados a apoyar al PANAL, violando flagrantemente la constitución en sus artículos 6°, 7° y 9° que garantizan la libertad de pensamiento, la libertad política y de asociación; sin embargo, quienes no se sometan a los designios y ambiciones de sus líderes, de inmediato son calificados como traidores y de estar atentando contra la unidad sindical.
Sin embargo, la realidad es terca, y es evidente que quienes están atentando contra la unidad interna del SNTE, contra la educación pública y en contra del pueblo de México, son precisamente dichos líderes, al hacer uso del chantaje, la amenaza y la corrupción a fin de satisfacer sus ambiciones políticas y económicas, y no quienes denuncian dichas corruptelas; el tiempo y la historia ubicarán a estos personajes en el lugar que les corresponde como traidores a la clase trabajadora y a la patria, y propiciar con sus acciones y actitudes entreguistas, la desaparición de este organismo sindical y de la educación pública.
Fuente: http://liberacionmexico.com/index.php/social/22-a-la-educacion-publica-la-hunden-la-corrupcion-y-la-ambicion-de-los-lideres-del-snte
Fotografía: laregiontam